Real Sociedad también espera por Jefferson Montero

Philippe Montanier ya ejerce de entrenador realista. El técnico llegó a Donostia cerca del mediodía de ayer, una hora más tarde de lo previsto inicialmente por el club. Él tomó un avión muy temprano desde Lille a Lyon, donde se encontró con Michel Troin, que a su vez se había desplazado en otro vuelo desde Niza, su localidad natal. Los dos viajaron juntos desde el aeropuerto de la ciudad del Ródano hasta Biarritz, donde les aguardaba un emisario de la Real que les condujo directamente por carretera hasta las oficinas de Anoeta.

A Montanier y su ayudante también les acompañaron sus abogados, ya que todavía quedaban pendientes bastantes flecos para cerrar definitivamente el acuerdo. Como no podía ser de otra manera al estar por resolver cuestiones burocráticas, el primero en recibirlos en Anoeta fue el gerente Iñaki Otegi, que además domina perfectamente el francés. Jokin Aperribay no se encontraba ayer en Donostia por motivos de trabajo. Todo se desarrolló con absoluta normalidad, ya que lo más importante estaba pactado verbalmente desde hacía varios días, aunque la firma definitiva se retrasó hasta después del almuerzo. Lo que sí parece claro es que, pese a que algunas informaciones en su país aseguraban que iba a percibir un salario de 750.000 euros netos, el montante de su contrato será inferior, aunque sensiblemente superior a los 500.000 euros (más 100.000 de prima por la permanencia) que percibía Lasarte.

sin declaraciones Tras la primera toma de contacto, pasadas las 12.30 horas, los técnicos bajaron hasta la puerta de las oficinas para posar bajo el enorme escudo de la Real que preside la cristalera. Los dos lucían un look elegante pero informal, con americana, pero sin corbata y pantalones vaqueros. Montanier llevaba una camisa y Troin una camiseta más moderna. Como ya había advertido el club, ninguno de los dos hizo declaraciones, aunque no tuvieron problemas para atender todas las peticiones de los fotógrafos y cámaras. La verdad es que no se les vio especialmente cómodos ante los flashes. Aunque la dimensión mediática en Valenciennes es muy inferior a la de la Real, a ninguno de los dos les llamó especialmente la atención la gran cantidad de periodistas que se dieron cita en el estadio para conocerles de cerca por primera vez. Lo que tampoco extrañaron fue la incesante lluvia con la que les acogió Donostia. Incluso Montanier bromeó con que el tiempo le recordaba al del norte de Francia, mientras veía con detenimiento un póster antiguo de la plantilla de la Real en la que reconoció a más de un futbolista.

Pasada la una de la tarde, llegó a Anoeta Loren para mantener el primer encuentro sobre la planificación de la temporada y para explicarles los pormenores de la organización del club. El encuentro fue largo, porque solo pararon para comer algo en el comedor del Hotel Xanti, aprovechando que se encuentra enfrente del estadio, justo al lado inverso de las oficinas. Una vez acabado el almuerzo, sin tregua, volvieron a retomar la reunión en uno de los despachos, y fue el momento elegido para la citada firma de sus contratos.

Aunque no tiene ninguna prisa, porque se encuentran a un mes de iniciar la pretemporada y a 50 días de que arranque la Liga, el cuerpo técnico tendrá que abordar pronto la decisión de las altas y bajas. En principio todo parece indicar que el club incorporará un mínimo de tres fichajes, que podrían ser uno o incluso dos más. Salvo Javi Garrido, que se encuentra en la lista para reforzar el lateral izquierdo, el resto de nombres que han aparecido hasta la fecha no parecen estar en la lista que maneja Loren. Según cuentan fuentes autorizadas del club, el director deportivo tiene las ideas muy claras de lo que necesita el equipo para mejorar al equipo y ya ha confeccionado un listado de candidatos que puso ayer a disposición del nuevo entrenador, que será quien tenga la última palabra. Entre las incorporaciones probablemente habrá un jugador cedido por un grande. Desde Vila-Real apuntaban ayer la posibilidad del interés realista en el extremo ecuatoriano Jefferson Montero, un viejo conocido del paso por Segunda.

La reunión con el director deportivo dio para mucho, porque no fue hasta pasadas las 19.00 horas cuando por fin se dirigieron hasta Zubieta para conocer las instalaciones en las que llevará a cabo su trabajo diario. Como era previsible, se quedaron gratamente sorprendidos por la calidad de los terrenos de juego. Allí saludaron al entrenador de porteros, Roberto Navajas, que casualmente estaba por ahí, y al preparador físico, Karla Larburu, entre otros.

Será hoy a las 18.00 horas cuando Montanier tomará la palabra para ser presentado oficialmente como nuevo entrenador txuri-urdin. El técnico se ha marcado como máxima prioridad aprender a hablar castellano y quiere que todo el mundo se comunique con él en este idioma para ir dominándolo más rápido.

Por último, el club realista desmintió rotundamente las informaciones en las que se relacionaba el nombre de Montanier al Barca.

Fuente: www.noticiasdegipuzkoa.com

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