
Por Alberto Molina
La Alianza Bolivariana para las Américas, simplemente conocida como ALBA (acrónimo de su nombre inicial Alternativa Bolivariana para América), está compuesta por países que a decir de sus gobernantes van camino a radicalizar sus procesos políticos o mejor dicho sus “revoluciones”, con una carga ideológica extrema; de la radicalización de marras no se libra ninguna institución del Estado, la militar es una de las damnificadas en este extraño proceso. La politización de los militares venezolanos es el ejemplo más palpable, el grito emblemático de “Patria, socialismo o muerte” lo dice todo; en Bolivia, la instrumentalización de los mandos en todos los niveles de la escala jerárquica por parte del Jefe de Estado es sentida permanentemente y produce escozor; amén en Nicaragua, donde el rehecho Ejército Sandinista se encuentra en una disyuntiva entre ser un ejército profesional o milicias al servicio directo de Ortega.
En Ecuador el diagnóstico y futuro son difíciles de predecir, partiendo del nombramiento de las máximas autoridades que desplazaron a los mandos históricos -conocedores del oficio-, dinamitaron su estructura (Cosena, Junta de Defensa Nacional; IAEN, Dirección de Inteligencia, Defensa Civil, etc.), en todas ellas se han nombrado para su manejo, civiles desconocedores absolutos del tema de seguridad y defensa nacional, “reforzados” por asesores con “aires” de intelectuales; recelando de su tradición democrática, no se consideraron en la nueva Constitución importantes misiones señaladas en la anterior (Garantes del orden constituido, que se deben al Estado, la existencia del Consejo de Seguridad, etc.); se ha negado la representación en varios estamentos del Estado; el presidente ya no firma los despachos de ascenso de los oficiales, sólo lo hace para Generales.
Me temo que para muchos entusiastas panegiristas radicales de la llamada Revolución Ciudadana, con una carga ideológica enfermiza, querrán que las FF.AA. sean reducidas al mínimo o sigan haciendo las tareas que le corresponda a la policía. Pienso que las consideran al menos útiles para contener las acciones producto de la situación que Colombia vive al interior de su territorio (subversión, narcotráfico, delincuencia, tráfico de armas, etc.). Si bien, se las ha dotado de algún armamento y equipo, aunque de dudosa calidad y procedencia.
Todo lo señalado, tarde o temprano tendrá su costo; en Venezuela ya hay algunos brotes de inconformidad, Chávez ha separado de las filas castrenses a algunas decenas de militares en diferentes jerarquías -desde Generales que colaboraron con él- denigrándoles y acusándolos de traidores.
En el Ecuador, luego del 30-S los militares se han visto obligados a cumplir actividades que no les corresponden y que se corre el riesgo de desprestigiarlas. Además, su preparación, entrenamiento, equipo y armamento están diseñados para cumplir misiones militares claramente señaladas en la Constitución, sin embargo ahora vemos que están cumpliendo tareas que le corresponde a la Policía Nacional, institución preparada y equipada para la seguridad ciudadana, triste papel que les ha asignado el gobierno de la revolución ciudadana a las gloriosas Fuerzas Armadas.
Alberto Molina es coronel, en servicio pasivo, de las Fuerzas Armadas del Ecuador.
Hablar de ALBA es como hablar de UNASUR, es como
hablar del Banco de Chávez para Sudmamérica, es como hablar de NADA,
absolutamente de NADA… es hablar de complejos autoritarios por parte de los
presidentes que tienen arrodillada –léase a sus ´pies- a todas las FFAA por que
en conjunto hacen todo lo que dicte el primer líder de la nación sin objeción
alguna… Luego del análisis concienzudo de mi Crnl. Molina me quedan
inquietudes sobre la proyectividad de las FFAA que con todo derecho la llama
«gloriosas» pero que los mandos actuales al estar compaginados con la
revolución verde lo único que están consiguiendo es que el ciudadano presidente
aglomere poderes para desbastar al Ecuador, país que ha vivido de glorias
vivientes que casi nadie las conoce, de héroes caídos pero olvidados, de
soldados creyentes en una causa que se ha desvanecido por la poca atención de
este gobierno, de viudas de los Héroes del 41 que claman por sus subsidios que
desde hace tres meses no son cancelados… Hoy con angustia veo que en Quito se
ha dispuesto que los uniformados –me refiero al Ejército- cuiden las esquinas
de los barrios lo cual tengo un mal presentimiento de que no se está apreciando
en su real magnitud la MISION de las FFAA y lo que éstos políticos traperos tratan
únicamente es de desprestigiarlas para tener pretextos y desmantelarla por lo
que me sigo preguntando… ¿los miembros de las FFAA habrán tenido acaso algún
tipo de reunión manifestando que no se los involucre en actividades que incumbe
netamente al ámbito policial? ¿Habrá todavía en las FFAA ese sentimiento patriótico
que cale hondo en el incipiente conocimiento militar de quienes hoy son los
militarillos de turno jugando a ser héroes bajo la batuta del civil y poeta Ponce
que como ministro de defensa fantasea como lo ha hecho en su pobre y
garabateada poesía que no ha pasado a más?. Luego de este interludio, y porque
amerita es que confronto para ver si existe el respeto mutuo que todos nos
merecemos ¿Exceptuando a los Generales-cargo político- hay algún miembro en la
oficialidad o en la tropa que tenga la valentía para presentar argumentos que
reordenen las actividades contempladas en la Constitución copiada a Venezuela
con la ayuda de asesores españoles y con la venia de los 130 de Montecristi?
Por ahora creo que ¡NO!, todos estamos viviendo el “fenómeno verde o socialismo
cuasi comunismo con tinte ambientalista” en el que a) se lo descuartizan al
Ecuador ante la modorra y la pasividad de todos los 12 millones de ciudadanos
que han servido como tontos útiles para que se destierren organismos de
seguridad que sin error los nombra mi coronel Molina b) ante nuestra esquiva
mirada se han inventado organismos, ministerios, secretarías cuyo afán es para
controlar-nos, más no para servir-nos al pueblo. Aquí hay una realidad
incontrolable y esa es encontrarnos en medio de la barbarie y de lo poco que
tenemos a nuestro alrededor latinoamericano, con lideres de poca monta –diría mi
compañero de caballería-, con la pobreza refregándonos en el rostro y viendo irónicamente
como los presidentes: ex guerrilleros, traficantes cocaleros, militares
sublevados e improvisadillos inauguran monumentos que simbolicen su socialismo
inventado, no creíble, socialismo fantaseado con el apoyo de la soldadesca
armada para atrapar a la gente ingenua al puro estilo de Cuba, cuya población y
con mucha pena lo digo, es un «cementerio viviente» y del cual los traficantes
de la pobreza o más conocidos como presidentes orgullosamente toman por ejemplo
para aplicarlos en sus respetivos países tales son los casos como: Venezuela,
Bolivia, Nicaragua, Ecuador… y para terminar, de las FFAA del ALBA o mejor
dicho de grupos armados liderados por dictadores ¿que enseñanzas y que doctrina
es la que se espera o esperan nuestros soldados???… porque de los dictadores
ya sabemos, quieren tener unos sicarios que protejan a sus hacedores con su
sangre y con la sangre del pueblo si el caso obligare… César R. Valverde Ayllón…