El gobierno de facto de Libia nombró este lunes un nuevo gabinete y se comprometió a dejar el poder después de que el país cuente con seguridad total.
El jefe del Consejo Nacional de Transición, Mustafa Abdul-Jalil, y el primer ministro de facto, Mahmud Yibril, dijeron que permanecerán en sus cargos hasta que la ciudad natal de Moamar Gadafi, Sirte, sea capturada.
Los gobernantes posgadafistas agregaron, sin embargo, que han firmado una promesa de «no participar en cualquier gobierno futuro de ninguna manera».
El anuncio de hoy se produjo después de varias semanas de que las luchas políticas internas estancaron los esfuerzos para formar un nuevo gobierno.