Los habitantes de Nueva York y su región están haciendo largas colas este martes para votar, de forma entusiasta y disciplinada, pese a que la zona aún está lejos de superar el desastre causado por el huracán Sandy la semana pasada.
Los colegios electorales abrieron desde las 06h00 hora local en la ciudad (11h00 GMT) y a primera hora de la mañana ya se comenzaban a formar colas en muchos de ellos a pesar del frío, pero la votación procedía con agilidad y las filas avanzaban rápido.
En la zona de Rockaways (Queens), una de las más afectadas por el huracán y donde aún no hay electricidad, se formaron filas desde primera hora de la mañana.
Esta jornada electoral tiene un sabor muy especial en Nueva York y su área metropolitana, donde más de un millón de personas sigue sin electricidad y varias decenas de miles han sufrido la pérdida o daños graves en sus casas a causa de Sandy.
Debido a ello, los estados de Nueva York y Nueva Jersey han tomado medidas sin precedentes para garantizar que los ciudadanos ejercen el derecho al voto.
Los ciudadanos de ambos estados desplazados por el huracán Sandy podrán votar en cualquier colegio electoral de su estado, mientras que en Nueva Jersey se ha permitido, adicionalmente, que se pueda votar por primera vez a través de correo electrónico o fax.
En la Gran Manzana, un total de 61 centros de voto han tenido que ser trasladados debido a que los edificios previstos inicialmente fueron dañados por el huracán o están siendo empleados como albergues para desplazados o almacenamiento y distribución de ayuda.
El alcalde de Nueva York, Michael Bloomberg, depositó sus papeletas muy temprano, a las 09h00 hora local (14h00 GMT) en el centro de voto instalado en una escuela pública situada muy cerca de su casa, en el barrio de Upper East Side.
Bloomberg apoyó públicamente la semana al actual presidente, el demócrata Barack Obama. EFE