Madrid, 2 ene (EFE).- La dirección de la aerolínea Iberia y el sindicato de pilotos Sepla se reunieron hoy para abordar el plan de reestructuración de la compañía, que prevé la eliminación de 4.500 empleos.
La dirección de la aerolínea, que en 2010 se fusionó con British Airways resultando el International Airlines Group (IAG), se mostró satisfecha por que el Sepla se incorporase al «mismo marco de negociación» que el resto de sindicatos, con los que ya se ha reunido en varias ocasiones.
El jefe de la sección sindical de Sepla-Iberia, Justo Peral, se mostró dispuesto a hacer «sacrificios», siempre que el marco de negociación implique «un plan de futuro y de crecimiento» para la aerolínea, según dijo a la prensa antes de la reunión.
Para los pilotos, este plan para rentabilizar Iberia implicaría «que se cumplan los acuerdos de la fusión, que no se segreguen los negocios y que se recupere la producción, que se ha cedido a terceros».
Peral aseguró que «lo que está gravitando» sobre la negociación es «el tremendo agujero de los fondos de pensiones» de British Airways.
Este déficit, en su opinión, se está intentando cubrir con los activos de Iberia y el despido de sus trabajadores.
El principal conflicto para el Sepla es la creación de la filial de bajo coste Iberia Express, ya que sus pilotos cobrarán un 40 % menos que los de la empresa matriz, y que los tiempos de escala en vuelos de corto y medio radio se reducirán a 35 minutos. EFE
* Foto difundida por EFE