Fuego y agua retratan la vida del barrio argentino de La Boca

Buenos Aires, 21 jun (EFE).- Los incendios, las inundaciones y las fiestas, como las Hogueras de la noche de San Juan, son elementos que definen la historia del emblemático barrio de La Boca, en Buenos Aires, y que a menudo retrataron los artistas que alguna vez se enamoraron de sus casas coloridas y sus aires de tango.

Entre ellos, Benito Quinquela Martín (1890-1977), un pintor que creció en La Boca y cuyo patrimonio se atesora en el museo que lleva su nombre y se sitúa en el corazón de este barrio del sureste de la capital argentina.

Bajo el título «La Boca está de fiesta», el Museo Quinquela Martín recoge en su última exposición temporal la mirada de distintos artistas que plasmaron en su obra la cotidianeidad del barrio a través de sus celebraciones pero también a través de sus tragedias, como los incendios e inundaciones que cambiaron su fisonomía a lo largo del tiempo.

Uno de los principales atractivos de esta muestra, que se mantendrá abierta hasta el 18 de agosto, es la oportunidad de contemplar el recién restaurado «Fogatas de San Juan» (1940), uno de los mayores exponentes de la serie de Quinquela Martín sobre el fuego.

Coincidiendo con la celebración de la Noche de las Hogueras, el 23 de junio, el museo exhibe este cuadro impresionista que muestra a los vecinos reunidos en torno a una gran fogata compartiendo la celebración nocturna.

«El pintor va a representar una y otra vez el fuego como centro de sus producciones, a veces desde el punto de vista de la tragedia, otras como centro de reunión, como es en este caso, y otras veces en las muchas acerías y herrerías que había en el barrio», explicó a Efe Víctor Fernández, comisario del Museo Quinquela Martín.

En «Incendio en La Boca» (Quinquela Martín, 1940) podemos ver la otra cara de la moneda: la parte trágica de la fiesta, ya que el fuego de la celebración de San Juan «era también el que no pocas veces afligía a los boquenses» causando numerosos incendios, agregó Fernández.

En esta pintura, Quinquela Martín retrata el sufrimiento de los vecinos que intentan sofocar las llamas de un edificio del barrio, construido, con la mayoría en la zona, con materiales pobres y fácilmente inflamables.

Las casas de chapa y madera son aún hoy el rasgo arquitectónico más característico de la Boca, «un barrio que atravesaba constantemente muchas dificultades, con un tejido social que sabía sufrir pero que también sabía celebrar llegada la ocasión», subrayó Fernández.

El río, otro de los elementos paradigmáticos de La Boca, también está presente en la exposición a través de imágenes y carteles que se remontan a 1940, fecha en la que se registró una de las mayores inundaciones del barrio, que permanece aún en la memoria de los viejos de la vecindad.

La fotografía «Inundación en La Boca» (1940) muestra la magnitud de la catástrofe con la imagen de cuatro hombres que, a pesar de estar enterrados en agua literalmente hasta el cuello, no pierden sus sonrisas.

«Esos momentos eran percibidos no como una fiesta, pero sí como celebración de otro de los rasgos distintivos del barrio: la solidaridad», continúa el comisario.

La muestra ha sido posible gracias a los fondos del archivo del museo Quinquela Martín, que se compone de pinturas, cartas, artículos de prensa, fotografías, cartelería y material personal que documentan la vida del pintor y la historia del barrio más emblemático de Buenos Aires, que debe su nombre a la curva donde se encuentran las aguas del Riachuelo con las del Río de la Plata.

Hoy, con cerca de 43.000 vecinos, la antigua «República independiente de La Boca» es parada obligada para los miles de turistas que se acercan a la capital argentina. EFE

ngp/mar/cr/Fotos: EFE; telam.com.ar; argentina.ar

Boca rio

Boca museo

Más relacionadas