Mandela se acerca al mes hospitalizado entre disputas familiares

Johannesburgo, 5 jul (EFE).- El expresidente sudafricano Nelson Mandela cumplió hoy 28 días internado en un hospital de Pretoria, los últimos 13 en estado crítico, entre las disputas que dividen a su familia sobre el lugar de su sepultura y su patrimonio.

La familia de Mandela siguió hoy en el disparadero, después del agrio enfrentamiento interno en los tribunales que acabó ayer con el retorno de los restos de los tres hijos difuntos de Madiba a la localidad de Qunu (suroeste), donde el héroe sudafricano creció y ha pedido ser enterrado.

Los restos de sus hijos volvieron a Qunu tras dos años en Mvezo, donde el nieto mayor del expresidente, Mandla Mandela, los había trasladado en 2011 sin permiso de los demás miembros de la familia.

El nieto es jefe tradicional de la aldea de Mvezo, en la que nació Madiba, como se conoce popularmente en Sudáfrica a Mandela.

Para forzar la vuelta a Qunu, 16 miembros del clan Mandela -entre ellos, las tres hijas de Madiba y su esposa- demandaron la semana pasada a Mandla ante un tribunal, que les dio la razón tras un proceso que ha manchado la imagen de la familia.

Por otra parte, la hija mayor de Madiba, Makaziwe Mandela, negó en una entrevista publicada hoy en la revista «New African» que la familia esté peleando por la herencia de su padre.

«Hay quien intenta tener acceso gratuito y completo a su propiedad intelectual (la de Mandela) para su propio beneficio comercial», explicó Makaziwe, preguntada sobre otro de los frentes judiciales abiertos por la familia, éste por el control de las empresas que gestionan el patrimonio de su padre.

Makaziwe y su hermana Zenani solicitaron en abril pasado ante la Justicia el cese, como directores de dos empresas de gestión del patrimonio de Mandela, de un antiguo abogado del exmandatario y de dos de sus compañeros de lucha contra el régimen racista de «apartheid».

Las hijas ponen en duda que fuera su propio padre quien nombrara al ministro Tokyo Sexwale y George Bizos, ambos exactivistas «antiaparheid», así como al letrado Bally Chuene, en puestos de dirección de las dos sociedades.

«Hemos visto a gente que utiliza su nombre, en muchos casos por dinero, y hemos mantenido un digno silencio como familia. Pero llega un momento en que debemos actuar. Si no, no seríamos ‘Mandela'», agregó Makaziwe.

Ante esas disputas familiares, el arzobispo emérito de Ciudad del Cabo y premio Nobel de la Paz de 1984, Desmond Tutu ha pedido a los Mandela que «busquen en su interior para encontrar la gracia que su patriarca y la nación merecen».

«No podemos pensar sólo en nosotros mismos. Esto es como estar escupiendo en la cara de Madiba», añadió Tutu, de 81 años, en un comunicado.

La Presidencia de Sudáfrica confirmó el jueves por la noche que Mandela, de 94 años, sigue en estado crítico pero estable.

Las especulaciones sobre la salud del antiguo líder parecen ser, sin embargo, asunto exclusivo de los medios, y no interesan demasiado a la mayoría de los sudafricanos.

«Es un hombre mayor que lleva muchos días muy enfermo. Zuma (Jacob Zuma, presidente del país) informa casi cada día de la situación, no sé dónde está el problema», dijo a Efe Peter Makubalo, un estudiante de Derecho de Johannesburgo.

Las suposiciones de la prensa sobre el pronóstico real de Mandela han puesto, asimismo, a la Presidencia sudafricana en el centro de la polémica.

«Es un trabajo difícil, porque requiere la gestión no sólo de la propia situación de la que se informa, sino también de cómo reaccionará la gente», dijo a Efe Joel Netshitenzhe, quien fue jefe de comunicación de Mandela durante su Presidencia (1994-1999).

«Deben asegurarse de no crear pánico y, al mismo tiempo, de comunicar los hechos», según Netshitenzhe.

«Hasta donde yo sé, él (Madiba) pidió hace tiempo que, llegado este momento, la situación fuera gestionada por el Gobierno en coordinación con la familia, que es lo que se está haciendo», agregó el exjefe de comunicación.

Entretanto, el Parlamento sudafricano celebró hoy en la Catedral de San Jorge de Ciudad del Cabo (suroeste) una misa para pedir la recuperación de Mandela. EFE

Una mujer con  un cartel que le desea mejoría al ex presidente Nelson Mandela llega al Hospital Mediclinic Heart en Petroria, la capital sudafricana, donde recibe tratamiento el otrora  líder contra el apartheid en Sudáfrica el domingo 16 de junio del 2013. (Foto AP/Ben Curtis)
Una mujer con un cartel que le desea mejoría al ex presidente Nelson Mandela llega al Hospital Mediclinic Heart en Petroria, la capital sudafricana, donde recibe tratamiento el otrora líder contra el apartheid en Sudáfrica el domingo 16 de junio del 2013. (Foto AP/Ben Curtis)
Una estatua de Nelson Mandela se levanta en la Plaza Nelson Mandela en el centro de compras de Sandton City en Johanesburgo, Sudáfrica, el 11 de junio del 2013 (AP Foto/Ben Curtis)
Una estatua de Nelson Mandela se levanta en la Plaza Nelson Mandela en el centro de compras de Sandton City en Johanesburgo, Sudáfrica, el 11 de junio del 2013 (AP Foto/Ben Curtis)
Miembros de la Liga de Mujeres del Congreso Nacional Africano marchan y cantan en apoyo al ex presidente sudafricano Nelson Mandela, el jueves, 4 de julio del 2013. Mandela, de 94 años, está hospitalizado desde el 8 de junio a causa de una persistente infección pulmonar. (Foto AP/Ben Curtis)
Miembros de la Liga de Mujeres del Congreso Nacional Africano marchan y cantan en apoyo al ex presidente sudafricano Nelson Mandela, el jueves, 4 de julio del 2013. Mandela, de 94 años, está hospitalizado desde el 8 de junio a causa de una persistente infección pulmonar. (Foto AP/Ben Curtis)
Oamohetswe Mabitsela, de cuatro meses, es colocado por su madre junto a una imagen de Nelson Mandela para tomarle una fotografía con la cámara de su teléfono afuera del hospital donde el ex presidente se encuentra hospitalizado en Pretoria, Sudáfrica, el jueves 4 de julio de 2013. Mandela continúa en estado crítico pero estable y no está en estado vegetativo, informaron el viernes 5 de julio las autoridades de Sudáfrica. (Foto AP/Ben Curtis)
Oamohetswe Mabitsela, de cuatro meses, es colocado por su madre junto a una imagen de Nelson Mandela para tomarle una fotografía con la cámara de su teléfono afuera del hospital donde el ex presidente se encuentra hospitalizado en Pretoria, Sudáfrica, el jueves 4 de julio de 2013. Mandela continúa en estado crítico pero estable y no está en estado vegetativo, informaron el viernes 5 de julio las autoridades de Sudáfrica. (Foto AP/Ben Curtis)

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