Violencia continúa en R.Centroafricana pese a intervención de Francia

Bangui, 6 dic (EFE).- Los enfrentamientos entre milicias rivales continuaron hoy en la capital de la República Centroafricana (RC), Bangui, donde se registraron también ataques indiscriminados contra civiles, pese a la intervención militar de Francia.

El religioso español Juan José Aguirre, obispo de la ciudad centroafricana de Bangasú, dijo hoy a Efe que los rebeldes de Séléka, partidarios del actual presidente centroafricano, Michel Djotodia, están «ajusticiando» a milicianos «Anti-Balaka» (que apoyan al expresidente François Bozizé) en Bangui, donde aseguró que se está produciendo una «matanza indiscriminada».

Aguirre está refugiado junto a otras 3.000 personas en una parroquia de la capital, adonde acudió a principios de esta semana para acompañar a varios periodistas españoles hasta el aeropuerto.

Ayer se disponía a volver en coche a su diócesis, pero los bombardeos y los intensos tiroteos entre las milicias y las fuerzas de seguridad le hicieron buscar refugio.

Según el Gobierno de transición de la República Centroafricana, los tiroteos y la tensión cesaron durante la tarde de ayer, pero Aguirre observa un panorama bien distinto.

«La situación está igual de tensa. Los Séléka -de confesión musulmana- están aprovechando ahora para salir a la calle a buscar a los «Anti Balaka» -cristianos- y asesinarlos», aseguró el obispo.

«Están matando con machetes y pistolas a jóvenes, y a veces incluso sin saber si realmente son ‘Anti-Balaka’. Está habiendo una matanza indiscriminada, es realmente duro», manifestó.

La coalición Séléka «está actuando con impunidad», afirmó el clérigo.

El obispo asegura que las tropas francesas, cuya intervención fue ayer autorizada por la ONU, han ocupado posiciones en lugares estratégicos de Bangui, si bien «aún no han entrado en los barrios, que es donde se está viviendo el verdadero drama».

Más de 130 personas han muerto en los combates entre milicias y las fuerzas de seguridad que sacudieron ayer Bangui, confirmó hoy a Efe la Cruz Roja de ese país.

«Hemos recogido más de 130 muertos hasta la noche pasada. Todavía no hemos visitado todas las zonas en las que ocurrieron ayer los combates. De momento, no podemos cerrar la lista (de víctimas mortales)», dijeron a Efe fuentes de la Cruz Roja.

La mañana del viernes empezó con incidentes violentos en distritos del sur de Bangui, mientras que también hubo altercados durante la noche otros lugares de la ciudad, según pudo constatar Efe.

La situación sigue siendo complicada en la capital, pese a que el presidente de Francia, François Hollande, anunció anoche el comienzo de una acción militar «de forma inmediata», tras recibir el apoyo del Consejo de Seguridad de la ONU para que las tropas francesas puedan intervenir en el país junto a un fuerza africana.

Varios testigos del norte, oeste y sur de Bangui aseguraron a Efe que miembros de Séléka están cometiendo abusos en esas zonas.

«Los militares franceses aún no han pasado a la acción esta mañana. Nuestro barrio ha sido invadido a primera hora de la mañana por hombres de Séléka. Roban, secuestran a jóvenes, matan y todos estamos huyendo», dijo a Efe Patrick Zoumaya, vecino del distrito de Fatima.

Entretanto, en el monasterio «Marie Mére du Verbe», en el cuarto distrito de Bangui, la situación humanitaria de miles de personas que huyeron de los combates este jueves comienza a ser difícil.

«No tenemos agua ni lugares para el aseo. No podemos salir a buscar comida, porque los hombres del Séléka están siempre presentes en nuestro vecindario», comentó a Efe Jacques Ouilikon, uno de los refugiados en el monasterio.

Pese a todo, Djotodia aseguró anoche que la situación estaba bajo control, tras decretar el toque de queda desde las 18.00 hasta las 06.00 en todo el territorio nacional.

El Ministerio de Seguridad Pública, por su parte, anunció el cierre de las fronteras de la República Centroafricana con la República Democrática del Congo, desde el jueves y hasta nuevo aviso.

Los ataques de las milicias «Anti-Balaka» llevaron ayer el caos a Bangui, donde se registraron intensos duelos con artillería pesada.

Los enfrentamientos ocurrieron antes de que la ONU autorizase la intervención militar de Francia, junto a una fuerza africana, para restablecer el orden en el país.

Las Fuerzas de Seguridad, apoyadas por miembros de Séléka, hicieron frente a las milicias cristianas.

En las últimas semanas, se han producido choques entre partidarios de Séléka y la milicias «Anti-Bakala» («antimachete» en sango, la lengua nacional), que han atacado a civiles musulmanes, confesión de los miembros de la milicia que apoya a Djotodia, pero minoritaria en el país.

La crisis de la República Centroafricana comenzó cuando, el pasado 24 de marzo, la capital fue tomada por los rebeldes de Séléka, que asumieron el poder en el país tras la salida de Bozizé al exilio. EFE

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