Año: 2013
Argentina envía a Chipre nuevo contingente militar para misión de paz
El Salvador jugará un partido amistoso con Ecuador el 21 de marzo
Prisión preventiva contra sospechosos del asesinato de Karina del Pozo
Colombia planea reparar en 2013 a 150.000 víctimas del conflicto
Venezuela aumentó sus compras a EE.UU. un 42,8 % en 2012
Las disculpas de Benedicto XVI
Quito, Ecuador
Si alguna dificultad ha ocasionado Benedicto XVI en las salas de redacción sectarias y en portátiles de vaticanistas aficionados es encontrar el adjetivo que siga a su nombre de Pontífice: ¿”conservador” y digno resultado de la prefectura de la doctrina de la fe o “progresista” y ex militante de los sectores de la teología de la liberación? ¿El Papa trasparente que amenaza con entregar a las autoridades civiles a los curas pederastas y sabe que el enemigo está dentro de la Iglesia o el encubridor de Maciel a quien finalmente en Luz del mundo llamó “falso profeta”? ¿Intelectual, frío, poco comunicativo, o sentimental porque en su primera encíclica habla del amor y responde inquietudes a los niños? ¿Austero con gustos por la vida monacal o despilfarrador porque supuestamente usa zapatos Prada?
Venezuela aspira organizar el Mundial de Baloncesto de 2019
Consorcio impulsa educación a distancia en países andinos
El legado de un Papa
Madrid, España
Desde que el 11 de febrero anunciara su renuncia hasta hoy, día en que se hace efectiva, Benedicto XVI ha tomado decisiones cargadas de significado. Unas tienen relación con las finanzas y otras, con los escándalos de pederastia. Joseph Ratzinger advirtió esta semana que la oración no supone aislarse del mundo, sino reconducirse hacia la acción. A ello se ha entregado. En solo diecisiete días ha puesto de manifiesto, casi en tiempo de descuento, su determinación para marcar el camino a su sucesor y también allanarlo ante los dos problemas que más erosionan en este momento la credibilidad de la institución.
