Quito, (EFE).- El Gobierno de Ecuador transfirió ayer una indemnización recibida de Colombia en favor de la familia del ecuatoriano Franklin Aisalla, muerto en un ataque del Ejército colombiano en marzo de 2008 contra un campamento ilegal de las FARC en la selva ecuatoriana, informó una fuente oficial.
Aisalla, que residía en Quito, se encontraba en el campamento de las FARC en Angostura, territorio ecuatoriano, la madrugada en que aviones colombianos bombardearon el lugar. Aunque su familia desmintió que perteneciera a la guerrilla, nunca se ha precisado qué hacía en el lugar.
El Ministerio de Justicia de Ecuador, entidad coordinadora de la ejecución de las obligaciones internacionales provenientes de los sistemas de Protección de Derechos Humanos, transfirió la indemnización a los familiares de Aisalla.
La entrega de la indemnización, cuyo valor no se ha dado a conocer, fue hecha por el ministro de Justicia en funciones, José Serrano, durante una reunión con la familia de la víctima, informó en un comunicado la unidad de comunicación de esa cartera.
La indemnización se ejecuta conforme a un acuerdo al que llegaron los Gobiernos de Ecuador y Colombia en septiembre de 2012, cuando ambos países pusieron fin a la ruptura de relaciones diplomáticas ocurrida como consecuencia del ataque en un sector de la selva ecuatoriana conocido como Angostura.
En 2010, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) admitió una denuncia de Ecuador contra Colombia por la muerte de Aisalla en la «Operación Fénix», ejecutada por el Ejército colombiano en Angostura, sin aviso ni permiso de las autoridades ecuatorianas.
En ese bombardeo y posterior incursión por tierra de las tropas colombianas, murieron, además de Aisalla, Luis Edgar Devia, alias «Raúl Reyes», entonces segundo al mando de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), y cuatro estudiantes mexicanos.
El ataque generó una aireada respuesta del presidente ecuatoriano, Rafael Correa, que rompió relaciones con Colombia y acusó al entonces mandatario de ese país, Álvaro Uribe, por la muerte de Aisalla.
En 2012, ya con Juan Manuel Santos como presidente de Colombia, ambos países restablecieron su relación diplomática y decidieron potenciar sus lazos de hermandad y cooperación. EFE