NUEVA YORK (AP) — Oscar de la Renta es famoso por el impresionante glamur de sus vestidos de gala hermosamente confeccionados y en su colección otoño 2014 hubo mucho de eso.
Pero el diseñador dominicano señaló el martes por la noche, cuando un grupo selecto de clientes fieles y medios acudieron a su estudio para su pasarela, que también quiere satisfacer a quienes que buscan algo de emoción, aunque no demasiada.
Había pantalones de piel negra bastante amplios coordinados con una mini chaqueta en blanco y negro y cuello azul. También presentó una chaqueta color crema con pantalones gris obscuro y botas blanco y negro.
Y aunque pocos se imaginarían a la Renta como un motociclista con una chaqueta de cuero, sí lo es y su versión llego en la forma de un traje entallado, cortado con láser, con una chaqueta y falda de cuero con adornos dorados, y unas botas de gamuza negra para terminar el modelo.
Pero se podía notar que todos estaban esperando por los vestidos de gala que llegaron más tarde, y cumplieron con las expectativas, eran impresionantes. Había un vestido atrevido de tul negro con lentejuelas negras y encaje. Y otro también de tul negro con un estampado de hojas doradas.
Dos vestidos más en tul causaron sensación, uno de color dorado y otro plateado, con un bordado de plumas laqueadas y suficientes cuentas para crear un efecto de sonido impresionante.
La pieza fuerte la lució la supermodelo Karlie Kloss (con una peluca corta): un vestido de lunares y volantes en blanco y negro.
Entre todos los asistentes estaba Barbara Walters esperando pacientemente.
«Este es el único desfile al que voy», dijo. «¿Por qué? Porque uso su ropa todo el tiempo».
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