Viamao (Porto Alegre), 10 jun (EFE).- Christian Noboa, centrocampista de Ecuador, no se entrenó hoy con normalidad y será la gran duda del técnico Reinaldo Rueda, que aún no ha concretado la presencia de uno de sus mejores jugadores para el estreno de su equipo en el Mundial ante Suiza.
El jugador del Dinamo de Moscú es una las piezas clave del esquema de Rueda. Es uno de los motores del juego creativo de Ecuador. Con la pérdida de Segundo Castillo por lesión, Noboa es el único gran referente de la «Tri» en la organización del fútbol del cuadro sudamericano.
Hoy, en el primer entrenamiento de Ecuador en Brasil, Noboa no se ejercitó junto al resto del grupo. Sus problemas musculares no acaban de finalizar y está entre algodones. En una primera parte del entrenamiento, estuvo en el gimnasio junto a sus compañeros. Corrió en la cinta con normalidad, pero después se quedó haciendo ejercicios específicos mientras el resto del equipo saltó al césped del campo de entrenamiento.
Después, el seleccionador Reinaldo Rueda, en rueda de prensa, informó de la situación de su jugador. El técnico colombiano mostró alguna esperanza de recuperar a su jugador.
«Es un tema para trabajarlo. Estamos a 72 horas para hacer esa decisión. Vieron que contra Inglaterra manejamos otras opciones. Vamos a ver lo mejor para ese partido. Por las características del rival. Vamos a ver a Oswaldo. Hizo un buen trabajo, conoce la dinámica y los conceptos que manejan», afirmó.
«Creo que es difícil. Estos dos hombres, Noboa y Castillo han realizado buenos años de clasificación. Vamos a trabajar estas horas en darles la seguridad que siempre brindaron. Es difícil reemplazar a dos hombres experimentados, a Segundo Alejandro y a Christian. Vamos a ser cautelosos con Christian y vamos a hacer una evaluación para ver si puede estar contra Suiza», agregó.
La situación de Reinaldo Rueda es complicada. Sin sus dos jugadores, perdería mucha calidad para ganar a Suiza. Con uno de ellos, Noboa, podría tener más opciones. Pero toda la atención no se centró en el centrocampista del Dinamo de Moscú. También estuvo pendiente de la evolución del portero Alexander Domínguez, que se entrenó casi con total normalidad.
Su lesión en una mano parece olvidada. Junto al preparador de porteros, trabajó duro para conseguir recuperar la confianza perdida después de casi tres meses inactivo. Su altura, algo más de 1’90, es muy importante para contrarrestar el juego aéreo de los rivales. Por si no llega a la cita contra Suiza, su sustituto Máximo Banguera está preparado para ocupar la portería.
El resto de la sesión estuvo marcada por la intensidad en la que se empleó el cuerpo técnico de Ecuador con sus jugadores. Primero, en el gimnasio, donde no hubo tiempo para el descanso. Después, sobre el césped. Allí el balón fue el máximo protagonista. El Mundial de Brasil está a punto de comenzar y Rueda mantiene a sus hombres en tensión. EFE
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