
Corría el minuto 93 del partido entre Atlético de Madrid y Real Madrid por la Supercopa, cuando Cristiano Ronaldo, en busca del gol del empate y de la prórroga, se lió a golpes con el defensa del Atlético, el uruguayo Diego Godín en el área pequeña del Atlético de Madrid. El árbitro Fernández Borbalán no dudó en amonestar con tarjeta amarilla la acción del portugués, aunque los rojiblancos pidieron airadamente la expulsión del jugador al considerar que se trataba de una clara agresión.
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