Dirigentes y personalidades de la izquierda ecuatoriana han enviado una misiva a los participantes del Encuentro Latinoamericano Progresista, convocado por Alianza País, con la finalidad de explicar su visión del Ecuador y sus discrepancias con el gobierno del presidente Rafael Correa.
El Encuentro Latinoamericano Progresista, que reúne a representantes de alrededor de 20 países, pretende consolidar una posición común en un frente internacional de izquierda que sea capaz de enfrentar lo que el presidente del Ecuador calificó como “la restauración conservadora”.
La carta que suscriben líderes izquierdistas como Alberto Acosta, María Paula Romo, Juan Cuvi, Natasha Rojas y Esperanza Martínez, entre otros, denuncia “la aplicación de políticas publicas” que son “impuestas por parte del gobierno, contradiciendo la nueva Constitución, vulnerando así derechos conquistados e impidiendo la consolidación de un verdadero proceso de cambio en el país”.
Esta situación, a criterio de los firmante de la carta, ha despertado “movilizaciones populares” y el gobierno, en lugar de generar procesos de participación, ha respondido con “creciente prepotencia, incremento asombroso de la represión y autoritarismo. El saldo de estas movilizaciones fue la judicialización de dirigentes sociales y populares y el inicio de la criminalización de la protesta social por el actual gobierno.”
Esta misiva también se queja de la “metida de mano” en la justicia, por medio de la Consulta Popular del 2011, y el fortalecimiento del “modelo extractivista”. Consideran que en siete años de gobierno “no se ha hecho nada para acabar con los grupos oligárquicos que concentran la riqueza en el Ecuador.”
Los izquierdistas terminan la carta pidiendo a los participante en el encuentro “su solidaridad” y la exigencia de que “no se presten a lavar la imagen de un gobierno que hacia fuera mantiene un discurso de izquierda, pero que hacia dentro actúa igual que los gobiernos de la derecha”.
De momento, no ha habido pronunciamientos de respuesta por parte de Alianza País.
Lea aquí la Carta Abierta: