Naciones Unidas, 17 nov (EFE).- La ONU llamó hoy a israelíes y palestinos a retomar el diálogo para evitar un empeoramiento de la situación sobre el terreno tras los choques registrados en Jerusalén y otras localidades en las últimas semanas.
«Volver a las negociaciones nunca ha sido más importante. La ausencia de un marco político creíble está endureciendo las posturas en ambos bandos y dando más espacio político a quienes buscan explotar la falta de confianza entre las partes», dijo al Consejo de Seguridad el secretario general adjunto interino para Asuntos Políticos, Jens Anders Toyberg-Frandzen.
Según el diplomático, «ha llegado el momento de que los líderes de las dos partes hagan compromisos difíciles que promuevan la estabilidad y aseguren la seguridad a largo plazo para israelíes y palestinos».
Toyberg-Frandzen, que intervino en la sesión mensual del Consejo sobre Oriente Medio, relató los episodios violentos registrados recientemente en Jerusalén y en Cisjordania y subrayó la necesidad de evitar «provocaciones unilaterales» y lenguajes «inflamatorios» si se quiere calmar la situación.
El responsable de la ONU expresó, además, su preocupación por el aumento de las demoliciones de edificios palestinos por parte de Israel y señaló que desde el 21 de octubre se han derribado en Cisjordania un total de 82 inmuebles, que han desplazado a 169 personas, incluidos 80 niños.
Toyberg-Frandzen recordó que esas demoliciones y el desplazamiento forzoso de población contravienen las normas internacionales, al igual que la construcción de nuevos asentamientos en territorios ocupados por Israel.
En ese sentido, subrayó que ese tipo de acciones «sólo impedirán las posibilidades de estabilidad a largo plazo y de una paz duradera y, por ello, debe darse marcha atrás».
Además de las tensiones de las últimas semanas, el diplomático abordó la situación en Gaza, donde aseguró que han comenzado a registrarse algunos progresos, como la puesta en marcha del mecanismo acordado para facilitar la reconstrucción de la franja.
Pese a ello, destacó las dificultades que sigue presentando la zona tras la incursión militar israelí de este verano y los riesgos de que vuelva a estallar la violencia.
A día de hoy, unas 80.000 personas que no tienen hogar, de las que unas 30.000 están refugiadas en instalaciones de las Naciones Unidas, señaló.
Por ello, pidió a Israel que acelere la aprobación de los proyectos de construcción y llamó a los donantes a cumplir con sus promesas de financiación.
Al mismo tiempo, Toyberg-Frandzen advirtió que todo ese esfuerzo de reconstrucción «está condenado al fracaso sin un alto el fuego a largo plazo» y si no hay una verdadera unión entre las distintas facciones palestinas.
Por último, se refirió brevemente a la situación en Siria, donde destacó las conversaciones «constructivas» mantenidas por el enviado especial de la ONU, Staffan de Mistura, con el presidente, Bachar al Asad, para tratar de crear progresivamente zonas libres de conflicto.
Toyberg-Frandzen indicó que De Mistura y su equipo van a empezar a trabajar en los detalles para detener los combates en la ciudad de Alepo, que sería la primera zona sin conflicto según el plan planteado por el diplomático italiano. EFE