
La Asamblea Nacional del Ecuador aprobó el envío del proyecto de Ley de Tierras a consulta prelegislativa. Los asambleístas de Alianza País la calificaron, mayoritariamente, como un beneficio para los campesinos ecuatorianos.
Durante el debate, la asambleísta María Augusta Calle invocó a «reconceptualizar lo que significa la estructura de la agricultura familiar campesina»; además abocó la necesidad de revalorizar el papel de la «mujer en la agricultura campesina», y dijo que «la redistribución de tierras es una necesidad».
Por su parte, la legisladora Pamela Falconí manifestó que «hablar de tierras, es hablar de soberanía alimentaria, ambiente y acceso con real planificación». A su criterio se debe ponderar la protección a la naturaleza en la ley.
La decisión se tomo con 93 votos a favor, prácticamente de todos los legisladores presentes.