
La periodista brasileña Manuela Picq, cuya visa de trabajo ha sido revocada por la Cancillería del Ecuador, abandonado Ecuador rumbo a Brasil. Ha sido una despedida emotiva: ella y su marido, el presidente de la Ecuarunari, Carlos Pérez Guartambel han llorado y se han abrazado antes de que ella entre a Migración.
«Me siento exiliada. Esta es mi llacta», ha dicho Picq. «He vivido en Ecuador desde 2004. Carlos y yo no somos una pareja, somos una familia. Nos hemos casado por el rito ancestral y yo soy ya una cañari», agregó.
Esta mañana, en una rueda de prensa en el parque de El Arbolito, en Quito, dijo que se va del Ecuador «por falta de garantías» y que en Brasil tratará de obtener la visa Mercosur.
El jueves, la jueza Paola Ayala de la Unidad Judicial Especializada Tercera de la Familia rechazó la acción de protección solicitada por la defensa de la franco-brasilera, que buscaba anular la cancelación de su visa que tenía vigencia hasta el pasado miércoles.

