El actual fenómeno de El Niño puede convertirse en uno de los cuatro más fuertes registrados en los últimos 65 años, dijeron este martes expertos de la Organización Meteorológica Mundial (OMM).
La probabilidad de que las temperaturas de la superficie del agua en las partes central y oriental del Pacífico tropical -adyacente a las costas de Centroamérica y Sudamérica- aumenten en 2 grados -o más- por encima de lo normal explica esa previsión.
Las temperaturas en agosto estuvieron ya entre 1,3 y 2 grados centígrados por encima de la media, superando en un grado los umbrales habituales de El Niño.
Esa situación «podría hacer que se convirtiera en uno de los cuatro episodios más fuertes de El Niño desde 1950», tras los registrados en los periodos 1972/1973, 1982/1983 y 1997/1988, indicó la OMM, una agencia científica de Naciones Unidas y autoridad en la materia.
La entidad adelantó que es altamente probable que El Niño se intensifique a finales del año.
«Históricamente, es probable que un episodio de El Niño alcance su fase máxima entre octubre y enero del año siguiente, y es frecuente que persista hasta bien entrado el primer trimestre antes de empezar a debilitarse«, explicó el organismo.
Más de la mitad de modelos de predicción indican que las temperaturas superficiales del mar alcanzarán o excederán los 2 grados por encima de la media entre octubre y diciembre.
Modelos más conservadores apuntan a que ese aumento se situará entre 1,5 y 2 grados.
Los efectos del episodio climático ya se hacen sentir en algunas regiones del mundo y serán más patentes, al menos, durante los próximos cuatro a ocho meses, sostuvo el jefe de la División de Servicios y Aplicaciones del Clima Mundial, Rupa Kumar Kolli. EFE (I)