El prefecto del Guayas, Jimmy Jairala, presentó una queja ante el Consejo Nacional Electoral (CNE) y la Policía Nacional, y pidió la intervención de las Fuerzas Armadas en la zona de La Manga del Cura que este domingo 27 de septiembre irá a consulta popular.
Jairala se pronunció tras los hechos de violencia registrados en los últimos días. Inicialmente, en una entrevista en radio Huancavilca, el ejecutivo guayasense informó que iba a presentar una queja formal ante el Consejo Electoral porque hay mucha gente de Manabí armada en la recta final de la consulta. “Tenemos fotografías que van a ser presentadas al CNE y a la Policía Nacional, aun cuando sea la Policía acantonada en El Carmen, es decir, a las órdenes de la Gobernación de Manabí”.
Hasta ese momento, Jairala señalaba que con la queja esperaba que el control lo ejerza no la Policía de Manabí, sino de otras plazas. “Tenemos fotos de personas que cargan pistolas en el cinto y no son gente de Guayas. Nosotros somos gente de paz”. También aclaraba que con este pronunciamiento no estaba ofendiendo a la provincia de Manabí. “Estoy hablando de gente presuntamente cercana a la Prefectura de Manabí, que es la que ha hecho la campaña sucia contra el prefecto (Jairala) y la provincia del Guayas”.
El pedido lo extendía al Ministerio del Interior para que investigue el tema de las armas y la conducta del prefecto de Manabí. Incluso, Jairala aseguraba que “el que ha originado este ambiente enrarecido es el prefecto de Manabí; no el pueblo manabita. Es una campaña sistemática, dirigida a menoscabar el trabajo de la provincia del Guayas, acusándonos de guerra sucia”.
Sin embargo, Jairala anunció que el pedido para el control de armas lo extenderá a las Fuerzas Armadas. “Uno no termina de entender por qué la Policía acantonada en la Manga del Cura es de la Subzona 13, o sea de Manabí, y están a la orden de la Gobernación de Manabí. Preferimos que sean las Fuerzas Armadas las que ejerzan el control”.
Jairala se basó en hechos para sustentar el pedido. Uno de ellos es la agresión perpetrada contra el dirigente pro Guayas, Antonio Bravo, y su hija, Katherine, en el recinto Santa Teresa. “Fue evidentemente una situación de gente pro Guayas versus gente pro Manabí”, lamentó el prefecto Jairala. “Su principal problema es estar en la línea pro Guayas”, recalcó.
Jairala recalcó que, “en lugar de llevar al herido a El Empalme, se lo llevaron a El Carmen y se ha sancionado, lo que para nosotros es un intento de asesinato, con tres días de reclusión… También el agredido está guardando prisión pero bajo custodio policial”.
Además, durante la cabalgata realizada por la Prefectura del Guayas, el sábado pasado, “los amigos del prefecto (de Manabí) nos cerraron la calle y la Policía del Carmen no fue capaz de abrirla… Eso es lo democrático que es el prefecto de Manabí; por donde va a pasar Guayas por ahí bloquea; por donde hay maquinaria del Guayas, por ahí nos ponen algún obstáculo”.
“Este es un proceso pacífico. De nada sirve que siga procurando desacreditar a la provincia delGuayas y sembrar esta especie de campaña de odio contra el Guayas”, agregó.
Pese a todo ello, Jairala reafirmó el respeto de Guayas a la consulta. “Nosotros nunca dijimos que no íbamos a estar el 27 (de septiembre) respaldando el proceso democrático. Es más, tenemos que respetarlo y tiene que ser el 27”. Eso incluye que se acatará el resultado electoral, sea cual fuere.
El ejecutivo guayasense también ratificó que se acogerá el silencio electoral y solo estará hasta este jueves en la Manga del Cura. “En los últimos días la gente está con la cabeza más caliente, de manera que no tiene caso que yo abone a una situación que esté lejos de respetar el silencio electoral, lo que significa que la gente de la Manga tiene que decidir sin ruido a qué provincia quiere pertenecer”. Eso implica que el día de la consulta tampoco estará en la Manga. (I)