La segunda vuelta para la elección presidencial en Argentina es «irreversible», anunciaron hoy dirigentes de la conservadora coalición Cambiemos, que encabeza Mauricio Macri, tras recibir los primeros datos de sus fiscales de mesa.
«La elección nacional es irreversible, hay segunda vuelta en Argentina», afirmó Ernesto Sanz, líder radical, aliado de Cambiemos en este proceso.
«Los datos están confirmando que hay ballotage. Primero todas las encuestas de boca de urna y ahora las mesas que se van abriendo están confirmando. Vamos al ballotage el 22 de noviembre. Y estamos convencidos de que el próximo presidente es Mauricio Macri», dijo Horacio Rodríguez Larreta, alcalde electo de la ciudad de Buenos Aires, en un encuentro con la prensa.
Los primeros sondeos de boca de urna divulgados tras el cierre de los colegios electorales en Argentina dan ventaja al oficialista Daniel Scioli, pero no con un margen suficiente para ganar en primera vuelta.
Según estos sondeos, el conservador Mauricio Macri sería el segundo más votado, seguido del peronista disidente Sergio Massa.
Ninguno de los candidatos, de acuerdo con estas encuestas, habría conseguido el 45 por ciento o el 40 por ciento y diez puntos de ventaja necesarios para llegar a la Casa Rosada.
La ley electoral argentina prohíbe difundir porcentajes de boca de urna hasta las 21.00 (2400 GMT), tres horas después de finalizados los comicios.
No obstante, Marcos Peña, jefe de la campaña de la alianza opositora Cambiemos, que lidera Mauricio Macri, en su primera evaluación tras el cierre de las urnas, ha declarado ya que habrá segunda vuelta. «Nos basamos en las encuestas de boca de urna, nuestras encuestas son muy precisas», dijo Peña, que evitó dar detalles sobre porcentajes de votación.
«Hay ballotage nacional y estamos confiados en ganar la provincia de Buenos Aires», dijo hoy Jorge Macri, jefe de campaña de Cambiemos en la provincia de Buenos Aires, el mayor distrito electoral del país.
El equipo de campaña de Macri compareció ante la prensa apenas veinte minutos después del cierre de las urnas.
«No nos parece prematuro, damos la información que tenemos. Asumimos postura con todas las reservas del caso de no dar números, pero hay ballotage y estamos con altísimas probabilidades de ganar la elección en la provincia de Buenos Aires», agregó Jorge Macri.
Por el equipo de campaña del oficialista, Daniel Scioli, expresó hoy su satisfacción por la «jornada democrática» que ha vivido Argentina y por el «triunfo contundente» de su candidato presidencial, aunque evitó referirse a si habrá o no segunda vuelta.
«Satisfacción por la extraordinaria jornada democrática y por el triunfo contundente de Daniel Scioli», dijo Alberto Pérez, jefe de gabinete de la provincia de Buenos Aires, en breves declaraciones a los medios en el búnker electoral del Frente para la Victoria.
«Los datos extraoficiales marcan un contundente triunfo de Daniel Scioli, por una enorme diferencia», apuntó Pérez, que adelantó que esperarán a que se levante la veda electoral y se anuncien los primeros resultados oficiales para adelantar las cifras de sus encuestas.
«Es un compromiso que hemos asumido y creo que es lo mejor para todos», agregó Pérez, quien, sin embargo, dio por seguro el triunfo del oficialista Aníbal Fernández en la provincia de Buenos Aires.
Unos 32 millones de argentinos estaban habilitados para elegir al sucesor de la presidenta Cristina Fernández, una controvertida líder que dominó la política nacional en la última década. Los argentinos deciden si dan vuelta la página y dejan atrás 12 años de kirchnerismo, el movimiento dentro del peronismo creado por Fernández y su antecesor y fallecido marido Néstor Kirchner (2003-2007) o apuestan por un continuismo diluido, con un candidato oficialista que promete cambios de forma más que de fondo.
Scioli, un ex piloto de motonáutica que perdió el brazo derecho en una competencia en 1989, se presenta a sí mismo como el que continuará las políticas de Fernández pero también reparará lo que no esté funcionando.
Macri, el alcalde de Buenos Aires, se describe a sí mismo como el que pondrá a la economía de Argentina en orden al prometer que llegará a un acuerdo con los acreedores estadounidenses y que levantará las impopulares restricciones para la compra de dólares y corregirá el tipo de cambio.
De confirmarse la tendencia, sería la primera vez que Argentina vive una segunda vuelta en los comicios presidenciales dado que el único antecedente de ballotage, en 2003, no llegó a concretarse porque el expresidente Carlos Menem renunció a competir con Néstor Kirchner, que se proclamó ganador con sólo un 22 por ciento de votos.
La jornada, según las autoridades electorales, transcurrió con normalidad y con incidentes aislados en algunas mesas, como falta de papeletas.
Seis candidatos competieron hoy por la Presidencia argentina, aunque las encuestas previas a la veda electoral daban ventaja a Scioli, seguido de Macri y Massa. (T)
Con reportes de EFE y AP
