Buenos Aires, (EFE).- Considerado uno de los mejores chefs del mundo, el vasco Andoni Luis Aduriz, que ha mostrado en Argentina los secretos de su restaurante Mugaritz, asegura, en una entrevista con Efe, que la cocina española es «inspiradora» y augura también un brillante futuro a la gastronomía latinoamericana.
El chef español, que formó parte del equipo de Ferran Adrià en «El Bulli», ha realizado una visita relámpago a Córdoba y Buenos Aires para presentar el documental «Mugaritz BSO», un proyecto gastronómico-musical que traduce sus platos al lenguaje de la música.
El documental, que ha pasado por decenas de festivales, entre ellos San Sebastián y Berlín, es un anticipo de las jornadas de Gastronomía y Cine que se celebrarán el próximo año en Argentina, en las que Aduriz presentará «Campo a través», una película que reflexiona sobre el mundo Mugaritz de la mano de Pep Gatell, uno de los directores artísticos del grupo catalán La Fura dels Baus.
Precisamente una las claves del éxito de Mugaritz, que figura en la lista de los diez mejores restaurantes del mundo, es el intenso trabajo, la creatividad y la combinación de la gastronomía con distintas disciplinas de la cultura, desde la música al cinepasando por las artes escénicas, explica Aduriz.
En sus 17 años de historia, continúa, Mugaritz ha colaborado con científicos y artistas «y nos dimos cuenta de que teníamos en común el desarrollo de la creatividad con cada una de las actividades».
«Uno de los ejes de Mugaritz es el cultural», afirma su propietario, volcado en «construir puentes» entre gastronomía y cultura.
No en vano, sostiene, «la gastronomía siempre ha sido una forma de cultura» y es también «un reflejo de la sociedad».
En un mundo globalizado como el actual, el sector vive en un momento en el que se combina «la mundialización con una necesidad de reivindicar lo propio y lo tradicional» y la gastronomía «marca cada vez más puntos de identidad», asegura en la entrevista con Efe.
«El abanico de posibilidades de la gastronomía es cada vez más infinito», afirma Aduriz, que comenzó su carrera en una pizzería y ha trabajado con algunos de lo más reconocidos chef españoles, como Juan Mari Arzak, Martín Berasategui y Adrià.
En el caso español, el reconocimiento internacional logrado por El Bulli o por los hermanos Roca, entre otros, ha creado una «inercia competitiva» que convierte a la cocina española en «tremendamente inspiradora».
«La gente mira a España para inspirarse» en el mundo de la gastronomía, afirma Aduriz, que augura también un futuro brillante para la cocina latinoamericana, con cocineros que compiten en el mercado internacional y nuevas aportaciones.
El sector de la gastronomía «necesita cosas novedosas y todo lo que tiene que ver con elementos de diferenciación se valora, que aparezcan cocinas nuevas apasiona y de ahí viene el auge de la cocina latinoamericana, muy bien conducido», apunta Audiz.
«Se está mezclando una necesidad de un mundo de cosas nuevas y gente joven que lo está sabiendo explicar. Por eso, la cocina latinoamericana va a tener mucho recorrido en los próximos años», pronostica.
Prueba de ello, subraya, es el éxito de productos originarios de Latinoamérica en la cocina europea, en especial en la española, y la combinación de platos tradicionales de influencia árabe o judía en el trabajo de los chefs latinoamericanos.
Y pone un par de ejemplos: «El arroz con leche no deja de ser un plato judío y el ceviche, antes desconocido, hoy está en restaurantes de primer nivel y se ha convertido ya en un plato global». EFE
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