Madrid, 25 ene (EFE).- El rey español Felipe VI retomó hoy los trámites para iniciar un nuevo proceso de consultas para proponer al candidato que se someterá a la investidura de jefe del Ejecutivo, en un escenario marcado por la incertidumbre y la falta de un aspirante claro.
El presidente del Congreso, Patxi López, se reunió con el monarca para facilitarle la lista de los líderes de los partidos de la Cámara Baja. tras la fallida ronda de contactos de la semana pasada, en la que el presidente en funciones, Mariano Rajoy, declinó la propuesta del rey, tras constatar que no tiene los apoyos para ser investido.
La nueva ronda de consultas comenzará este miércoles, 27 de enero, sin fecha determinada de finalización.
El 20 de diciembre, las urnas confirmaron el fin del tradicional bipartidismo español con el que PP (en el poder, centroderecha) y los socialistas se alternaban en el poder desde hace décadas, y aparecieron con fuerza dos nuevos partidos, Ciudadanos (liberales centristas) y Podemos (izquierda antiausteridad).
El PP fue la lista más votada con 123 escaños, por delante de los socialistas PSOE (90), Podemos (69) y Ciudadanos (40). Con la mayoría absoluta del Congreso fijada en 176 diputados la tarea de formar alianzas resulta complicada en un país poco acostumbrando a esta coyuntura de pactos y alianzas políticas.
Desde la renuncia del líder del PP, quien aseguró que solo se retiraba de la carrera presidencia por el momento, todas las miradas están puestas en el líder de la oposición, el socialista Pedro Sánchez, que pretenden liderar una coalición junto a Podemos y fuerzas nacionalistas.
El líder socialista inició este fin de semana -y proseguirá en los próximos días- una primera toma de contacto con los partidos de la oposición, de cara a reunir el apoyo parlamentario para sacar adelante su candidatura.
A pesar de estos movimientos, los socialistas creen que la responsabilidad de formar gobierno corresponde al PP de Mariano Rajoy en primera instancia, por ser la lista más votada.
El número dos del PSOE, César Luena, advirtió hoy que los socialistas no están dispuestos a hacerse con la presidencia «a cualquier precio», y que la preferencia de su partido es gobernar «en solitario» en vez de hacerlo en coalición.
Ambos mensajes estaban dirigidos a Podemos, cuyo objetivo es, según señalaron al rey la semana pasada durante la primera ronda de consultas, formar un gobierno en coalición con socialistas en el que su líder sería vicepresidente de un Ejecutivo liderado por el PSOE, con la repartición al 50 por ciento de los ministerios, entre ellos el de la plurinacionalidad.
A pesar de la proximidad ideológica, las diferencias en materia territorial entre socialistas y Podemos -que defiende la celebración de un referéndum sobre la independencia de Cataluaña-, es uno de los principales escollos a la hora de alcanzar un acuerdo.
Iglesias advirtió hoy que «no cree en la vía» de votar la investidura de Sánchez «sin entrar en el gobierno» y señaló que para que haya acuerdo es «imprescindible» una composición del Gobierno «proporcional» al resultado de las urnas.
El vicesecretario de comunicación del PP, Pablo Casado, tachó hoy de «suicida» un posible pacto PSOE-Podemos para España, por el carácter radical que atribuyen al partido liderado por Iglesias, èro también para España.
«Sánchez tiene que decidir si se va a montar en el avión de Maduro con los de la CUP y Podemos o va a volver a la centralidad», avisó el líder popular, que negó la posibilidad de apoyar cualquier gobierno que no lidere su formación o facilitarlo con la abstención.
El líder de Ciudadanos, Albert Rivera, calificó hoy de «irresponsable» la actitud tanto de Rajoy como de Sánchez de «tirarse la pelota uno al tejado del otro» y urgió a uno de los dos a «proponer y liderar una negociación» para intentar formar Gobierno.
«No se puede pretender ser presidente sin presentarse a la investidura, pero Rajoy y Sánchez siguen jugando al gato y al ratón y eso no es lo que toca», señaló Rivera, que, como cuarta fuerza política, ofreció «diálogo» a ambos. EFE (I)
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