SEÚL, Corea del Sur (AP) — La presidenta de Corea del Sur advirtió el martes que Corea del Norte enfrenta el colapso si no abandona su programa de bombas nucleares, un ataque verbal raro fuerte y extraordinario que muy probablemente enfurecerá a Pyongyang.
En una conferencia parlamentaria televisada a nivel nacional para defender su decisión de cerrar un parque industrial que su país compartía con Corea del Norte, la presidenta Park Geun-hye aseguró que Corea del Sur tomará medidas «más duras y efectivas» para hacer que Corea del Norte se dé cuenta de que sus ambiciones nucleares solo derivarán en acelerar el «colapso de su régimen».
Park cerró el parque en respuesta a una prueba reciente de cohetes de largo alcance, la cual Seúl y Washington vieron como una prueba de tecnología de misiles balísticos prohibida. El mes pasado, Corea del Norte también realizó un ensayo nuclear: el cuarto.
La prueba con cohetes y la prueba atómica acercan a Corea del Norte a la posibilidad de que desarrolle un misil con armas nucleares que podría alcanzar la parte continental de Estados Unidos.
Sin entrar en detalles, Park afirmó que Corea del Norte ha malversado los pagos de Seúl que eran para los trabajadores norcoreanos en el parque industrial y los ha desviado al gobierno de Pyongyang, que está a cargo del desarrollo nuclear y de misiles. También dijo que Corea del Sur ha enviado más de 3.000 millones en ayuda gubernamental y civil Corea del Norte desde mediados de la década de 1990.
El principal partido de oposición de Corea del Sur criticó la decisión del gobierno de suspender las operaciones en Kaesong y dijo que la medida solo profundizará la tensión con Corea del Norte y causará más temor entre los surcoreanos. Legisladores liberales también afirmaron que el cierre de Kaesong no es eficaz porque Corea del Norte mantiene lazos económicos con China y Rusia.
Es raro que un alto funcionario surcoreano mencione un colapso del gobierno en Corea del Norte debido a las preocupaciones sobre el grado de sensibilidad de Corea del Norte para hablar de que su gobierno autoritario está perdiendo poder. Pyongyang ha acusado desde hace mucho tiempo a Washington y Seúl de una campaña a favor de su colapso. (I)
Por HYUNG-JIN KIM, Associated Press