CARACAS, Venezuela (AP) — El presidente venezolano Nicolás Maduro afirmó el viernes que está preparado para «lo que sea» que sus adversarios planteen para desalojarlo del poder, y que «sus enemigos abiertos» fracasarán en el intento de recortar su mandato de seis años mediante un referendo revocatorio.
Maduro dijo que nada de lo que se están haciendo sus adversarios tiene viabilidad política y que el movimiento oficialista continuará en el poder al menos hasta el 2018.
En un acto de gobierno transmitido por la televisión estatal, el mandatario manifestó que sus adversarios están desesperados porque va pasando el tiempo y ven que los venezolanos «vamos a comer las hallacas (el local plato navideño) en revolución con Nicolás Maduro en diciembre, y que llegará enero y febrero y llegará el 2018. El pueblo no me va a fallar».
«Estoy preparado para lo que sea, donde sea, cuando sea y como sea», aseveró Maduro, quien anunció que ya articuló un equipo oficialista que estará a cargo de verificar la legalidad de las firmas recolectadas por la oposición para activar el proceso revocatorio.
El anuncio se produjo un día después que la coalición opositora informó que el miércoles pasado, primer día de la recolecta, sumó más de 600.000 rubricas. Eso representa más del triple de las firmas exigidas las autoridades electorales para avanzar en el proceso de referendo revocatorio.
La oposición asoció la masiva asistencia de firmantes al creciente descontento que enfrenta el gobierno de Maduro ante una desbordada inflación, severos problemas de abastecimiento de alimentos y medicinas, y una compleja crisis eléctrica que obligó esta semana a las autoridades a imponer cortes de luz en 19 de los 24 estados del país, una medida que desató protestas en algunas ciudades.
El Consejo Nacional Electoral (CNE) exigió a la alianza opositora 1% de las firmas (197.978) del total del padrón electoral nacional, estimado en 19,8 millones de venezolanos, para avanzar en los trámites del proceso. Si las autoridades electorales validan las firmas, la oposición podrá pasar a otra fase que implica la recolección de casi cuatro millones de rúbricas para activar formalmente el referendo.
La coalición espera consignar a inicios de la próxima semana en el CNE las firmas para su validación y activar en los próximos meses el referendo contra Maduro, quien este año alcanzó la mitad de su mandato de seis años.
Al respecto, Maduro comentó que ha tomado medidas para que las normas que rigen la eventual activación del proceso de referendo se cumplan a cabalidad.
«Una vez que sean entregadas esas listas (de firmas), las revisaremos una por una», expresó. «Si el CNE decide que continúe el proceso… bueno, que se haga eso en paz», añadió.
La coalición opositora acordó en marzo impulsar de forma simultánea el referendo revocatorio y la enmienda para acelerar el fin del gobierno de Maduro. La Constitución establece que se puede activar el referendo revocatorio a un funcionario electo popularmente luego que alcance la mitad de su período.
La mayoría opositora del Congreso aprobó la semana pasada en una primera discusión un proyecto de enmienda constitucional que contempla el recorte del mandato presidencial de seis a cuatro años y la eliminación de la reelección indefinida. La iniciativa será sometida en los próximos días a un segundo debate para su aprobación final. La modificación del texto constitucional solo podrá entrar en vigencia luego de que sea aprobada en unos comicios.
El Tribunal Supremo de Justicia emitió esta semana una sentencia que establece que el mandato del presidente Maduro no se vería afectado por una enmienda constitucional.