CARACAS, Venezuela (AP) — La corporación estatal Petróleos de Venezuela S.A. registró en 2015 una caída de 40,7% en sus ingresos en comparación con el año anterior, debido al desplome de los precios del crudo, según el informe de resultados auditados.
Los ingresos de PDVSA, que es el corazón económico de Venezuela, alcanzaron el año pasado los 72.169 millones de dólares, lo que representó un fuerte retroceso en comparación con los 121.895 millones de dólares que logró la corporación en 2014.
El desplome de los ingresos generó un fuerte impacto en las ganancias integrales de la corporación que cerraron en 2015 en 2.588 millones de dólares, lo que representó una caída de 79% al compararlas con las ganancias de 2014 que fueron de 12.465 millones de dólares.
El ministro de Petróleo y presidente de PDVSA, Eulogio Del Pino, desestimó el deterioro de los ingresos y las ganancias. En una entrevista difundida el domingo por la televisora local Televen, declaró que PDVSA logró obtener ganancias a pesar de que el precio promedio de la cesta petrolera venezolana se ubicó el año pasado en 44,65 dólares por barril, muy por debajo del valor promedio de 88 dólares por barril de 2014.
«Por tercer año consecutivo, PDVSA se mantiene como la quinta empresa más importante del planeta», expresó Del Pino en el informe financiero de la empresa.
El deterioro del precio del barril petrolero, que se ha mantenido durante este año, ha golpeado la economía venezolana que enfrenta una de las mayores crisis de su historia con una desbordada inflación de tres dígitos, severos problemas de escasez, y una profunda recesión.
El informe se señala que PDVSA mantuvo en 2015 una producción promedio de 2,86 millones de barriles diarios, y unas exportaciones por 2,42 millones de barriles al día.
Asimismo, las cuentas por pagar a los proveedores concluyeron el año pasado en 19.052 millones de dólares, lo que representó un leve retroceso en comparación con 2014.
Del Pino también le restó importancia al caso de las cinco personas se declararon culpables en Estados Unidos por el pago de sobornos a cambio de contratos millonarios con la petrolera venezolana, y lo atribuyó a una «situación coyuntural, puntual».
El ministro dijo que se realizó una auditoría para determinar la «magnitud del daño» que el acto de corrupción podría generarle a los resultados financieros de PDVSA.
La corporación anunció en marzo pasado que José Ramos, Christian Maldonado y Alfonso Gravina, quienes están siendo procesados en Estados Unidos por el pago de sobornos y lavado de dinero, ocuparon «cargos temporales» de bajo nivel en la filial PDVSA Services INC y fueron removidos de sus puestos antes de que las denuncias se hicieran públicas.
Por este caso también están siendo procesados los empresarios Abraham Shiera y Robert Rincón, quienes fueron acusados en Estados Unidos de lavado de dinero y violar la Ley Federal de Prácticas Corruptas, que prohíbe el pago a gobiernos extranjeros para facilitar acuerdos empresariales.