La fiebre por la serie «Golden Girls» revive en Nueva York 30 años después

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Nueva York, (EFE).- Aunque 31 años después del estreno de la serie ya solo Betty White siga viva, las icónicas «Golden Girls» siguen dando guerra con la apertura de un café homenaje, un espectáculo parodia de marionetas en el Off-Broadway y un libro que repasa todos los secretos de la serie de Susan Harris.

Se trata de Rose Nylund (Betty White), la adorable viuda de Minesota siempre dispuesta a rememorar sus historias; Dorothy Zvornak (Bea Arthur), la divorciada que intenta aportar la voz de la sabiduría al clan; Blanche Deveraux (Rue McClanahan), la sureña promiscua, y Estelle Getty (Sophia Petrillo), la más anciana y sin pelos en la lengua.

Cuatro señoras viviendo en Miami y resolviendo sus problemas en torno a una tarta de queso a media noche, una premisa para una serie a la que cualquiera habría deseado escasa suerte pero que cautivó a espectadores, especialmente mujeres y gays, de varias generaciones y sin la que el género de la «sitcom» nunca hubiera sido igual.

«Thank you for being a friend», el título de la canción de la serie, vuelve a sonar en la parodia con marionetas que se representa con éxito en el Off-Broadway y detrás de la que está Jonathan Rockeffeler, que explicó a Efe que la grandeza de la serie reside «en su capacidad de divertir a generaciones de espectadores y de tocar asuntos delicados con naturalidad».

«Pocas veces se fue tan políticamente incorrecto y se habló tan claro sobre asuntos como el sida o el aborto en televisión y sin quejas ni restricciones de la cadena», coincide el autor de «Golden Girls Forever», Jim Colucci, el autor de la más amplia retrospectiva publicada hasta la fecha.

Colucci, que pudo entrevistarse antes del fallecimiento con las protagonistas, revela algunos secretos como que Susan Harris concibió en un primer momento también el personaje de un joven gay que hacia las tareas del hogar.

«Se iba a llamar Coco y parecía representativo sacar también esa parte de Miami. Llegó a rodarse con él un primer episodio pero eran demasiados personajes y era difícil encajar así un episodio de media hora», explicó Colucci.

Aunque todos los personajes han pasado al recuerdo con dignidad, Sophia fue «el hit del momento», recuerda Colucci, que reconoce que la emigrante italiana era su preferida.

Aunque toda la serie ha pasado a la historia como un referente gay, por no mencionar que para muchos el punto de partida que inspiró después otras series más recientes como «Sexo en Nueva York», si hay un «icono» cultural para los seguidores homosexuales es Blanche Deveraux, contó a Efe Michael LaRue, a punto de abrir una cafetería sobre la serie en el alto Manhattan.

El dueño explica que a McClanahan, la interprete de «Blanche», le «divertía mucho siempre preguntar por qué era la preferida de los gays».

«Porque nos gustaría ser como tú», cuenta Michael LaRue que le contestaba a la que dice fue su «mejor amiga».

«Este café es un homenaje a todas pero especialmente a ella. Era una mujer maravillosa y segura de si misma y sí, como en la serie, tenía mucho éxito con los hombres».

«Se casó seis veces. El día que murió estuve con ella y aún me hablaba de un séptimo», dijo con una sonrisa.

El Emmy que Rue McClanahan recibió por la serie, el traje que llevaba aquella velada, así como los zapatos que usó en el primer episodio e incluso su vestido de promoción estarán en la cafetería para gusto de los seguidores de la serie que sí, también podrán degustar tanto pastel de queso como café con cuatro sabores, uno por cada chica de oro.

Betty White, con quien recientemente habló el dueño, ha prometido estar en la inauguración «si aún sigue viva, fueron sus palabras», explicó a Efe LaRue.

White, de 94 años, ha experimentado en los últimos veinte años el tramo más prolífico de su carrera, con series de éxito como «Hot in Cleveland», la película «The Proposal» y apariciones en «Saturday Night Live».

La entrañable Rose Nyland, de Saint Olaf, pese a ser la única superviviente, no era la más joven del elenco. La «pupila» era Rue McClanahan, quien murió en 2010 con 76 años.

Getty, en la piel de «Sophia», la matriarca de origen italiano, fallecida en 2008, tenía un año menos que Arthur, «Dorothy», su hija en la ficción, nacida en 1923 y quien murió en 2009. EFE

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