Asamblea Nacional aprueba el Código del Ambiente

Asamblea Nacional, debate de la Ley de Cultura.

La Asamblea Nacional (Parlamento) de Ecuador aprobó hoy el proyecto de Código Orgánico del Ambiente, que establece regulaciones en diferentes ámbitos de la gestión ambiental, informó el Legislativo.

La norma, según un comunicado del Parlamento, mejora el Sistema Descentralizado de Gestión Ambiental en lo relativo a la prevención, reparación y sanción de la contaminación y los daños ambientales.

Entre otras medidas, también incorpora la facultad de la Autoridad Nacional Ambiental para establecer cambios en la categoría de las áreas protegidas cuando no cumplan sus funciones biológicas y ambientales.

La ley, aprobada con 75 votos a favor, ocho en contra y 33 abstenciones, ratifica el mandato popular de la consulta de 2011 sobre los espectáculos públicos con animales y reafirma que la regulación final sobre este asunto corresponde a los municipios.

En esa consulta, 93 municipios ecuatorianos aprobaron la celebración de corridas de toros, mientras que 111, entre ellos Quito, las prohibieron, si bien se permite el toreo siempre que no incluya la muerte del animal en la plaza.

El código también prohíbe la cacería deportiva y dispone la obligación de regulación por parte de los gobiernos autónomos descentralizados de la pelea de gallos, el rodeo montubio y los toros de pueblo.

La sesión parlamentaria fue seguida por grupos de personas vinculadas al mundo taurino y ganadero y al de las peleas de gallos, que manifestaron su preocupación por el futuro de estas tradiciones.

Los «galleros» consideran que esta ley los deja sin amparo en los municipios en los que eventualmente sea prohibida su actividad.

Grupos de seguidores de estas tradiciones se dirigieron tras la votación al Palacio de Carondelet, sede de la Presidencia, donde expresaron sus inquietudes a un representante del Ejecutivo y manifestaron que continuarán reclamando el tiempo que sea necesario en las calles, hasta que se les brinde una solución.

Los simpatizantes de estas manifestaciones tradicionales hicieron sonar cornetas y profirieron gritos de «olé» y «vivan los galleros» para añadir una nota festiva a sus reivindicaciones.

El Código Ambiente, por otro lado reconoce la participación estratégica de las personas que se dedican al reciclaje para el manejo de residuos sólidos en las ciudades e incorpora un novedoso sistema para la aplicación de sanciones, entre otras medidas. EFE (I)

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