Un inesperado apagón de energía eléctrica matizó la explicación que el presidente del Consejo Nacional Electoral (CNE), Juan Pablo Pozo, dio a la prensa sobre el proceso de recuento de 3.865 actas previsto para hoy, desde las 08:30, en el coliseo Rumiñahui.
Incluso la autoridad electoral hizo mofa de la coincidencia del apagón, en alusión a la denuncia que hizo semanas atrás el candidato presidencial Guillermo Lasso (CREO-SUMA), de un supuesto “apagón informático” en el proceso de escrutinios de la segunda vuelta.
Pozo afirmó que el anuncio de la no presencia de los delegados de CREO-SUMA a este recuento no atrasará ni detendrá lo resuelto por el pleno del CNE de dar paso al “recuento de casi el 11,2% de los votos”.
Se acreditará a 500 delegados de cada organización política, aunque Pozo indicó que ha invitado como testigos a representantes de más de 169 organizaciones sociales y políticas, así como a las misiones de observación internacional.
Unos 100 militares custodian desde el fin de semana las 3.865 cajas con los respectivos votos, que en la operación matemática realizada por el CNE habla de 1’275.450 votos, tomando en cuenta que en cada Junta Receptora del Voto acudieron a sufragar los 330 empadronados, sin considerar la cifra del ausentismo.
Para el proceso del recuento de votos se colocaron 250 mesas con dos sillas cada una hasta donde pueden acceder un delegado de cada organización política. También se levantó una tarima dentro del escenario central del coliseo donde se ubicarán los consejeros del CNE.
Según la planificación de Pozo, la tarea de recuento de votos concluiría hoy mismo, a las 20:00, e inmediatamente el pleno del CNE sesionará para conocer los resultados electorales que se obtengan de esa etapa de revisión de votos, luego se notificará a las dos agrupaciones para que en caso de que lo consideren presenten nuevos recursos.
Todo este proceso debe concluir hasta antes del 24 de mayo, fecha de posesión constitucional de las nuevas autoridades del Gobierno que reemplazarán a Rafael Correa.
Ayer, a las 11:00, el Tribunal Contencioso Electoral (TCE) notificó la inadmisión del recurso de apelación presentado por el procurador común de la alianza CREO-SUMA, cuyo objetivo era pedir la apertura de la totalidad de las urnas a fin de efectuar un nuevo escrutinio manual de los resultados.
El juez sustanciador Arturo Cabrera consideró que es improcedente e ilegal dar paso a dos pretensiones al mismo tiempo: la “nulidad de escrutinios” y la apelación de “resultados numéricos”, porque tienen requisitos, oportunidad, motivación, fundamentos distintos y trámites diferentes.
Para inadmitir la petición se apega al art. 22 del reglamento de trámites que dispone “cuando en un mismo escrito se pidan acciones incompatibles”. (I)