Las mujeres cineastas en Iberoamérica solo representan el 18 %

Actriz Sonia Braga Brasileña. foto tomada de la web

Las mujeres directoras de cine en Iberoamérica solo representan el 18 %, un porcentaje que cae al 7 % en otras categorías como la dirección de fotografía o el sonido, según un estudio presentado hoy por la Federación Iberoamericana de Academias de Cine, Fiacine.

En la especialidad de guion y en montaje, las mujeres suman el 22 %, en producción el 27 %, en música el 7 % y únicamente en dirección de arte (43 %) e interpretación (51 %) las cifras están más igualadas.

De los 798 largometrajes estrenados en 2016 en los 10 países incluidos en el estudio -Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Ecuador, España, México, Paraguay, Portugal y Venezuela- solo un 10 % correspondieron a mujeres en el apartado de ficción y un 21 % en documentales.

Los datos forman parte de las conclusiones del I Foro de Cineastas Iberoamericanas que se ha celebrado estos días en el marco del Festival de Cine de San Sebastián y que fueron presentadas en rueda de prensa por la directora general de Fiacine, María Fernanda Céspedes, y Azucena Rodríguez, representante de la Academia española.

El foro ha contado con Suecia como país invitado y espejo en el que se quieren mirar las cineastas iberoamericanas, ya que este país ha logrado la paridad detrás de las cámaras en solo tres años, al pasar de un 26 a un 50 % de mujeres directoras entre 2012 y 2015.

La directora del Instituto Sueco de Cine, Anna Serner, explicó que el plan para reducir la brecha de género ha consistido en detectar y desmontar las «ideas falsas» que existen en torno a las mujeres en los puestos de dirección.

Ideas como que no hay suficientes mujeres buenas, que no tienen suficiente experiencia o que no lo hacen porque no quieren.

En este sentido, Serner recordó la película «The Merchant of Venice» (1914), de Lois Weber, es anterior a «The Birth of a Nation» (1915), de D.W. Griffith, pero «la historia la borró», y que, aunque es cierto que a menudo las mujeres no quieren dirigir, también lo es que tienen que escuchar advertencias que no reciben los hombres.

«Las mujeres jóvenes que quieren ser directoras oyen mensajes como ‘estás loca, no ves lo difícil que es, qué vas a hacer con los niños, tendrás que viajar mucho», enumeró Serner, mientras que para ellos el mensaje es: «Será duro pero no tienes nada que perder, ve a por ello».

Según Serner, nunca había habido tanto cine sueco de calidad como en los últimos cuatro años, y una de cada tres películas suecas premiadas en festivales ha sido dirigida por una mujer.

Eso sí, en Suecia el plan de fomento de la igualdad va acompañado de un presupuesto de ayudas al cine que supera los 140 millones de euros anuales (164 millones de dólares).

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