BUENOS AIRES (AP) — En la cancha, Lionel Messi frotó su zurda y condujo a la Argentina al Mundial de 2018. Pero al parecer contó con una misteriosa mano externa.
Se lo conoce como el brujo Manuel, quien llegó a Quito para “ayudar” a la Albiceleste a romper el martes alguna clase de maleficio que la venía persiguiendo desde hace un tiempo.
Tras el 3-1 final ante Ecuador, con tres goles de Messi, fue el propio presidente de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), Claudio Tapia, el que admitió un día después que el misterioso hombre “tuvo mucho que ver” con la agónica clasificación a Rusia.
En la antesala del partido, las cámaras de televisión de cadenas locales pusieron la mira en un hombre de unos 60 años, de baja estatura, que acompañado por un miembro de la delegación argentina daba vueltas alrededor del campo de juego del estadio Atahualpa. No tenía indumentaria oficial sino una casaca a rayas con la inscripción Argentina.
“Estaba mal, había unas cosas hechas para que no metiera goles. Fui y destrabé eso, nada más. Jugaban bien, pero no hacían goles”, dijo el Brujo Manuel, del cual no trascendió su apellido, a medios argentinos tras el regreso al país.
Convertido en una celebridad, explicó que su trabajo consistió en recorrer el campo de juego y visitar el vestuario antes del partido en Quito. “Hago lo que tengo que hacer y nada más. Nadie me ve”, aseveró sin dar más detalles.
Se comenta que el brujo Manuel se ganó fama en el fútbol por su “trabajo” exitoso con Estudiantes La Plata cuando obtuvo la Copa Libertadores 2009. No llamó la atención, entonces, que llegara a Quito junto a Claudio Gugnali y Julián Camino, ayudantes de Alejandro Sabella, ex técnico de Estudiantes y de la selección.
Según Manuel, una energía negativa rodeaba al plantel argentino y lo atribuyó al “trabajo” de colegas de Brasil para que Argentina no ganara la final del Mundial 2014 ante Alemania. Mencionó también una supuesta promesa incumplida de los jugadores del seleccionado campeón del mundo en México 1986 porque no agradecieron personalmente a la Virgen de Tilcara, en norte argentino, la conquista del título.
Creer o reventar, Argentina está en el Mundial por Messi y Manuel también. (D).