Los empleadores en Estados Unidos crearon en enero 200.000 puestos de trabajo, una cifra sólida, y los sueldos aumentaron ese mes a su mayor ritmo en más de ocho años, prueba de un mercado laboral con una salud uniforme.
El débil aumento de sueldos ha sido una de las limitaciones más persistentes de la economía durante casi una década. Sin embargo, debido a una falta de trabajadores, los empleadores se han visto obligados a aumentar las pagas. Algunos de los incrementos de enero reflejan aumentos de una sola vez, como el del salario mínimo en algunos estados.
El alza de sueldos deja entrever que los empleadores se disputan a un número limitado de trabajadores. El alza a los sueldos derivada por las rebajas impositivas de los republicanos y los incrementos al salario mínimo en 18 estados posiblemente también impulsaron la elevación de las pagas el mes pasado.
La tasa de desocupación permaneció en 4,1% por cuarto mes consecutivo, el nivel más bajo desde el 2000, dijo el viernes el Departamento de Trabajo en su informe mensual de empleo.