El diseñador irlandés Richard Malone inauguró hoy la 66 edición de la Semana de la Moda de Londres, que hasta el día 20 presentará propuestas variadas para la temporada otoño invierno.
Algunos de los nombres más consolidados y reputados de la industria se codearán durante cinco jornadas con prometedoras firmas emergentes, como el citado Malone, de solo 26 años, que hoy recibió elogios de la crítica con una apuesta atrevida, vanguardista, original y llena de color.
Fiel a un estilo funcional y siempre femenino, las maniquíes de Malone desplegaron llamativos diseños en los que abundaban los tonos estridentes, con predominio de los verdes, del azul eléctrico o del rojo, combinado con mucho fleco y tejido de cuadros.
El modisto optó además por siluetas enfundadas en pantalones vaporosos, llenos de campanas, patrones geométricos y creaciones asimétricas -algunas de formas imposibles- en forma de chaquetas y abrigos de hombros anchos, mangas amplias y abiertas.
Otros platos fuertes para esta edición correrán a cargo de marcas de toda la vida, como la tradicional e icónica Burberry, cuyo desfile está programado para mañana, House Of Holland o Mary Kantrantzou.
También hay una gran expectación alrededor de la francesa Maison Martin Margiela, con John Galiano como director creativo, o Erdem, del diseñador turco canadiense Erdem Moralioglu, considerado uno de los niños mimados de la moda que, una vez más, volverán a la capital británica.
La organización prevé que alrededor de 14.000 espectadores acudan a los más de 120 eventos programados entre espectáculos, desfiles y presentaciones de firmas extranjeras y nacionales.
Por otro lado, entre los diseñadores menos conocidos que emplearán la LFW como plataforma para lanzar sus diseños, pisan con fuerza en esta ocasión firmas como Halpern o la londinense Sadie Williams.
La marca Delpozo, la firma española con mayor proyección internacional del momento, cuyo director creativo es el catalán Josep Font, hará también su nueva propuesta este domingo en la sala londinense en el Insitute of British Architects.
Otro español, Emilio De la Morena, una presencia constante en los últimos años de la Semana de la moda londinense, exhibirá su colección el próximo martes, a las 09.00 GMT, inaugurando los desfiles previstos para ese día.
Desde el próximo día 22 y hasta el 25, el Consejo de Moda Británico (BFC) -institución que preside y organiza el evento- albergará, además de los desfiles, un sinfín de espectáculos abiertos al público.
Entre ellos habrá charlas con figuras prominentes de la moda, sesiones de preguntas y respuestas, y paneles de discusión con expertos del sector.
Caroline Rush, la directora ejecutiva del BFC, recordó que la Fashion Week londinense «tiene como objetivo proporcionar a los consumidores no solo una percepción y experiencia de la industria de la moda, sino también un fin de semana sin parangón de estilo, innovación, compras y bienestar«.
«Desde la icónica Zandra Rhodes en la pasarela, hasta espacios comisionados por expertos de la industria como Steve Morriss y Lucy Williams y paneles de discusión, con Dahphne Guinness y (la chef británica) Deliciously Ella, celebran este fin de semana la profundidad creativa de Londres», apuntó Rush.
Otras citas que han acaparado la atención mediática son la del desfile de la firma Zandra Rhodes, conocida por sus creaciones dramáticas y glamurosas, y por las propuestas inspiradas en los vestidos icónicos a los que tendía la diseñadora en los comienzos de su carrera.
También hay expectación por la marca neoyorquina Nicopanda, que suele optar por enfoques juguetones y extremados o Juicy Couture, cuya propuesta para la temporada otoño invierno se desvelará el domingo.
Otro evento programado es la presentación de la edición limitada de bolsos «tote» del galardonado Markus Lupfer, conocido por su innovador uso de los diseños gráficos y bordados. EFE