Guayaquil.- Con la presentación del fragmento de una obra, el dramaturgo guayaquileño Santiago Roldós recibió del Municipio de Guayaquil, la noche del miércoles 9 de mayo, las instalaciones del Espacio Muégano Teatro, ubicado en el callejón Magallanes y calle Rocafuerte, en la Zona Rosa de la ciudad, muy cerca de edificios patrimoniales guayaquileños.
Está compuesto de una sala de teatro experimental, una especie de laboratorio para amoldar y cultivar el arte. El alcalde de Guayaquil, Jaime Nebot, entregó el espacio cultural a Roldós, quien lo administrará por los próximos 25 años.
Con butacas llenas, Roldós recibió al alcalde Nebot con una obra de su autoría que puso en escena para deleite de las autoridades como la vicealcaldesa Doménica Tabacchi y la concejala Luzmila Nicolalde, los directivos de la Fundación “Guayaquil Siglo XXI” a cargo de la construcción del nuevo espacio teatral, familiares, amigos y estudiantes de Muégano Teatro.
Durante su intervención, el alcalde Nebot manifestó que este es otro espacio cultural para diversificar el arte en la ciudad y dentro de unos días arranca la segunda fase de ese ambicioso proyecto cultural que tiene como objetivo realizar encuentros artísticos para todo tipo de público y aglutinarlos como sede cultural en el centro de la ciudad.
De esta manera, la agrupación Muégano inicia su trabajo en las tablas en casa propia desde donde darán clases, ofrecerán talleres y promoverán actividades preservando su independencia y autonomía artística para generar cambios con sus expresiones artísticas y culturales.
Santiago Roldós agradeció al Alcalde Nebot, a León Roldós, a Siglo xxi, y sus auspiciantes Banco de Guayaquil, Claro, La Ganga.
«Hace más de una década Muégano Teatro decidió proyectar su trabajo en y desde Guayaquil, bajo la idea de habitar la corriente en contra de la corriente. Pensamos que hoy más que nunca tiene sentido impulsar la eclosión y la multiplicación de la diferencia, y que la ciudad merece centros de experimentación que consideren al teatro en su dimensión ética y en su potencia para divertir sin socavar la inteligencia.
Para eso es el nuevo Espacio Muégano Teatro: para insistir en una humanidad deliberante, capaz de asumir su historia en la exacta medida en que se vuelve un artefacto del afecto, la indignación y la memoria«.
