El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, afirmó hoy que la disposición a reunirse de los presidentes de Rusia, Vladímir Putin, y Estados Unidos, Donald Trump, ya es en sí un «hecho positivo» habida cuenta del «estado calamitoso» de las relaciones entre Moscú y Washington.
«El que los presidentes Putin y Trump estén dispuestos a reunirse y se preparen para esa reunión ya es un hecho positivo, habida cuenta del estado, por decirlo así, calamitoso de nuestras relaciones bilaterales», dijo Peskov a la prensa en alusión a la cumbre que celebrarán los mandatarios el próximo día 16 en Helsinki.
El portavoz agregó que «cualquier encuentro de este tipo tiene una especial importancia».
Preguntado por la marcha de los preparativos de la cumbre, Peskov respondió que de esto se ocupa, principalmente, el Ministerio de Asuntos Exteriores, así como las divisiones gubernamentales que se encargan de «asuntos que pueden estar en la agenda» de las conversaciones.
Desmintió las informaciones de prensa acerca de que el asunto central de la cumbre ruso-estadounidense será la retirada de las fuerzas iraníes del territorio de Siria.
«Dichas informaciones no se corresponden con la realidad», dijo el portavoz del Kremlin, quien señaló que «difícilmente dos partes pueden hablar de una tercera y tomar decisiones en nombre de ella».
Añadió que «sin duda, la problemática siria será objeto de intercambio de opiniones» y que «la parte rusa se prepara y Putin está preparado para debatirla».
El portavoz del Kremlin no pudo confirmar si los presidentes de Rusia y Estados Unidos darán una rueda prensa al término de la cumbre.
«Confiamos en que los jefes de Estados ofrecerán una conferencia de prensa después de sus conversaciones», se limitó a señalar Peskov al ser consultado sobre ese particular. EFE