Netanyahu considera «histórica» la aprobación de ley de nacionalidad judía

El primer ministro israelí Benjamin Netanyahu durante la reunión semanal de su gabinete en su oficina en Jerusalén, el domingo 29 de enero de 2017. (Abir Sultan, Pool vía AP)

El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, consideró que «éste es un momento decisivo en la historia del sionismo y del Estado de Israel», después de que el Parlamento aprobara la «Ley Básica de la Nación-Estado», que garantiza la identidad judía del país.

«Hemos consagrado en la ley el principio básico de nuestra existencia», declaró el jefe de Gobierno en su cuenta de Facebook sobre la nueva normativa que solo reconoce la autodeterminación en el país a este colectivo.

«Israel es el Estado nación del pueblo judío, que respeta los derechos individuales de todos sus ciudadanos. Este es nuestro Estado, el Estado judío«, afirmó y añadió: «Hoy lo hemos hecho ley: esta es nuestra nación, idioma y bandera».

El propósito de la ley, según el texto, «es asegurar el carácter de Israel como el estado nacional de los judíos con el fin de codificar en una ley básica los valores de Israel como un estado democrático judío en el espíritu de los principios de su Declaración de la Independencia».

Esto incluye el himno Hatikva (adaptación musical de un poema judío sobre el retorno del pueblo a Israel), la bandera blanca y azul con la estrella de David en el centro, una menorá (candelabro judío) de siete brazos con ramas de olivo en los extremos como símbolo del país y el hebreo como lengua oficial.

El presidente del Parlamento, Yuli Edelstein, también declaró con espíritu de celebración que el pleno había «hecho historia» al aprobar «una de las leyes más importantes que jamás hayan pasado por la Knéset», informó la radio del Ejército.

Los críticos de la ley señalan que es discriminatoria para las minorías, como los árabes israelíes (palestinos que se quedaron dentro de las fronteras de Israel tras la creación del Estado, en 1948), y que las provoca de manera innecesaria al subrayar el trato estatal preferencial a los judíos.

«Nadie se cree que al Gobierno le interesa la nacionalidad ni el Estado de Israel», dijo Shelly Yajimovich, diputada del partido laborista de la oposición Unión Sionista, la cual agregó que esta ley fomenta una forma «envilecida de nacionalismo que odia al otro», según el diario Yediot Aharonot. EFE

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