Corea del Sur dijo hoy que cualquier cambio en la situación de sus maniobras militares con Estados Unidos, sea la reanudación o suspensión de las mismas, está sujeto a discusión entre ambos aliados que, por el momento, no han tratado el tema.
El cambio en la situación de los ejercicios es un asunto «que debe ser discutido y decidido por Corea del Sur y EE.UU. mientras se revisa el progreso en la desnuclearización de Corea del Norte«, dijo hoy en el portavoz de la oficina presidencial de Seúl, Kim Eui-kyeom, en una rueda de prensa recogida por la agencia Yonhap.
Las declaraciones del portavoz surcoreano llegan horas después de que el secretario de Defensa estadounidense, James Mattis, restara importancia a la suspensión en junio de unas maniobras conjuntas con Corea del Sur y advirtiera de que su país no descarta retomar estos ejercicios militares el próximo año.
«Suspendimos algunas maniobras por orden del presidente como muestra de buena voluntad (…). Ahora mismo no tenemos planes de suspender nuevas maniobras», declaró Mattis durante una rueda de prensa celebrada el martes en el Pentágono.
Los ejercicios que Washington y Seúl venían celebrando anualmente eran considerados por Pionyang como una provocación, por lo que el presidente de EE.UU., Donald Trump, ordenó suspenderlos tras su cumbre con el líder norcoreano, Kim Jong-un, en Singapur en junio.
Si bien el portavoz surcoreano dijo hoy que la decisión afectaba sólo a las maniobras programadas para este año, insistió en que cualquier cambio en el acuerdo debe discutirse y afirmó que «hasta el momento, el tema no ha sido abordado» por ambos países.
El diálogo abierto entre Washington y Pionyang para llevar a cabo la desnuclearización de la península de Corea, uno de los acuerdos alcanzados por los líderes en su histórica cumbre, parece estancado, debido a sus diferencias sobre cómo emprender este proceso.
La mención a las maniobras conjuntas se produce, además, después de que la Casa Blanca se haya mostrado decepcionada en los últimos días con los «progresos» logrados tras la cumbre, lo que llevó a Trump a cancelar el viernes el viaje que el secretario de Estado, Mike Pompeo, tenía previsto realizar esta semana a Pionyang. EFE
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