El presidente iraní, Hasan Rohaní, aseguró hoy que Estados Unidos está dando «marcha atrás» en la imposición de sanciones a Irán, cuya segunda ronda entra en vigor el 5 de noviembre, porque «no puede frenar las exportaciones de petróleo» del país.
«El nuevo plan de EEUU contra Irán definitivamente fracasará y están retrocediendo. Primero dijeron que iban a reducir las exportaciones petroleras de Irán a cero; después que a cero no es posible en el mes de noviembre; y luego poco a poco dijeron que quieren disminuirlo», dijo el mandatario en la reunión semanal del Gobierno.
Según el comunicado de la Presidencia iraní, Rohaní subrayó dirigiéndose a Washington: «Ustedes ni pueden frenar las exportaciones de petróleo de Irán, ni pueden reducirlas a la cantidad que deseen».
Las exportaciones petroleras de Irán superaron los 2,5 millones de barriles diarios en los primeros seis meses de 2018, pero desde entonces han ido cayendo hasta 1,8 millones aproximadamente.
Ayer, el Gobierno estadounidense insistió en que su objetivo es reducir «a cero» los ingresos que Teherán obtiene de la venta de petróleo, pero dijo estar «preparado» para eximir de sus inminentes sanciones a algunos de los países que están haciendo un esfuerzo para reducir sus importaciones de Irán.
Esas excepciones serían consideradas de forma individual, en una evaluación que iría «caso por caso», indicó en una rueda de prensa el portavoz del Departamento de Estado Robert Palladino, sin detallar los países beneficiados.
Los principales compradores de petróleo iraní, como China, India o Corea del Sur, están intentado lograr exenciones y han reaccionado de diferente modo a las sanciones estadounidenses y a su posible cumplimiento.
Al respecto, Rohaní subrayó hoy que «muchas potencias» de Asia y Europa han anunciado «en los últimos días en sus mensajes que están del lado de Irán».
«También les decimos a los socios comerciales de Irán que esta presión de EEUU es temporal y que nuestros lazos con ustedes son permanentes», advirtió, añadiendo que los estadounidenses «no pueden decidir por la región y las grandes naciones».
Pese a estos mensajes optimistas, Rohaní reconoció que «tal vez en los últimos meses la situación haya sido difícil» para la población iraní.
No obstante, aseveró que «el Gobierno está haciendo todo lo posible para reducir los problemas» y no permitirá que «esta tendencia continúe».
EEUU volvió a imponer sanciones a Irán tras retirarse en mayo pasado del acuerdo nuclear multilateral de 2015 con Teherán, que el resto de firmantes -Rusia, China, Francia, el Reino Unido y Alemania- intenta salvar .EFE