Esposa de Guaidó afirma cúpula militar sostiene a Maduro está más fracturada

Fabiola Rosales. EFE/Alba Vigaray

La esposa de Juan Guaidó, Fabiana Rosales, dijo este jueves a EFE que, la pequeña cúpula que sostiene al presidente venezolano, Nicolás Maduro, está cada día más fracturada.

En conversación telefónica con EFE desde Jamaica, en la penúltima jornada del nuevo período de sesiones de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), órgano autónomo de la Organización de Estados Americanos (OEA), que se celebra hasta mañana en Kingston (Jamaica), Rosales agregó que tras el levantamiento encabezado en Caracas por su marido junto a un grupo de soldados el pasado 30 de abril, se «produjo una rotura en la cadena de mando».

En sus periodos de audiencias la CIDH examina la situación en diferentes países del continente americano, como el estado de la libertad de expresión.

Hoy Rosales y Romy Moreno, esposa del opositor Roberto Marrero, el principal colaborador de Guaidó, comparecieron en una de las audiencias en las que la CIDH dio seguimiento a la concesión el pasado 25 de enero, por parte de la comisión, de medidas cautelares al jefe del Parlamento, Juan Guaidó, y pidió al Estado que proteja su vida y la de su familia.

«La Comisión solicita al Estado de Venezuela que adopte las medidas necesarias para proteger los derechos a la vida e integridad personal, y garantice la seguridad del señor Juan Guaidó y de su núcleo familiar», indicó entonces la CIDH.

Ignacio J. Alvárez, abogado y representante del presidente Guaidó y de Marrero, indicó a EFE, que en esta ocasión la CIDH escuchó a Rosales y Moreno.

«En la audiencia de hoy se trataba de actualizar la situación tras el dictamen de las medidas cautelares a Guaidó y su familia, así como de Marrero. También llevamos a conocimiento de la CIDH, la situación del vicepresidente de la Asamblea Nacional, Edgar Zambrano, y la situación de diez diputados amenazados».

Zambrano fue detenido, junto a otras tres personas, por agentes del Servicio Bolivariano de Inteligencia (SEBIN) cuando se encontraba en la sede de su partido, Acción Democrática (AD, socialdemócratas).

Al negarse a bajar de su vehículo fue trasladado en una grúa escoltada por miembros del Servicio de Inteligencia al Helicoide, sede del organismo.

La Asamblea Nacional Constituyente (ANC), por solicitud del Tribunal Supremo de Justicia, levantó la inmunidad a Zambrano y a los también legisladores Henry Ramos, Luis Florido, Mariela Magallanes, Américo de Grazia, Richard Blanco y Simón Calzadilla, por su presunta implicación en varios delitos relacionados con el fallido levantamiento militar del pasado 30 de abril.

«Están tratando de hacer un golpe de estado a la Asamblea Nacional», dijo a EFE Álvarez.

Por su parte, Rosales dijo que la CIDH se mostró «muy receptiva» en la sesión celebrada hoy, y agregó que en el transcurso de la misma «denunciamos la muy violenta y arbitraria detención de Zambrano».

Tras detallar la «constante violación de derechos humanos» que vive diariamente Venezuela, recordó que la vida de su esposo, la de su hija y la propia «corre peligro».

«Ya dijeron que no era suficiente con llevarle a la cárcel, que había que llevarle al paredón…», subrayó Rosales a EFE.

Pero, subrayó, «no hay vuelta atrás, seguimos avanzando».

Venezuela atraviesa un pico de tensión política desde el pasado enero, cuando Maduro juró un nuevo mandato de 6 años que no reconoce la oposición y parte de la comunidad internacional y, en respuesta, Guaidó se proclamó presidente interino del país, tras lo cual fue reconocido como tal por más de 50 países, con Estados Unidos a la cabeza. EFE

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