
El exmandatario y candidato boliviano Carlos Mesa reiteró este sábado su llamamiento a la «movilización pacífica» y afirmó que la Policía no está amotinada, sino que respeta su papel como establece la Constitución y que se suma a la defensa del «voto popular».
En un pronunciamiento en una plaza pública de La Paz, Mesa insistió al pueblo boliviano en no caer en la violencia y a defender que la única salida segura y constitucional a la crisis política que atraviesa el país es la «convocatoria a una nueva elección con un nuevo Tribunal Supremo Electoral».
«Estamos en los umbrales de un triunfo incuestionable de la democracia, de derrotar a quien ha ignorado el voto popular y que está cerca de ser una dictadura», señaló Mesa, quien se enfrentó a Morales en las elecciones presidenciales del 20 de octubre, en las que asegura que se cometió un fraude.
Luego se trasladó a pie junto a varios de sus simpatizantes a la sede del Comando Nacional de la Policía en La Paz, donde abrazó y felicitó a los agentes que custodiaban la sede por su posición pacífica ante el pueblo boliviano.
Mesa dijo ante varios policías que su institución «ha sido olvidada por el Gobierno» y destacó su posición de no reprimir y sumarse a «la defensa del voto popular«, en referencia a la decisión de varios agentes de amotinarse en varias ciudades del país.
El expresidente entonó en varias ocasiones la frase: «Nadie se cansa, nadie se rinde», que se ha vuelto un himno de las movilizaciones que piden la salida del presidente Morales.
Finalmente, le pidió a los militantes del oficialista Movimiento al Socialismo (MAS) que no se sumen a la violencia, que «no cedan a la provocación, que no entren en ese juego brutal violento que puede dejar más muertos».
Policías de La Paz se concentraron este sábado en una unidad de esa fuerza cercana a la plaza Murillo, donde se encuentran las sedes del Gobierno y el Legislativo bolivianos, un día después de que los uniformados en varias regiones se amotinaran.
Grupos de personas contrarias a la reelección del presidente Morales intentan llegar hasta el lugar para expresar su respaldo a los policías de La Paz, como lo hicieron en la víspera ciudadanos que llegaron a las unidades policiales en las regiones donde los uniformados se amotinaron. EFE