La tercera temporada de la serie de Netflix The Crown, que se estrena este domingo, insinúa que Isabel II le fue infiel a su esposo con el gerente de su cuadra de caballos de carreras, lord Porchester, al que la reina llamaba cariñosamente Porchey, según se ha conocido por la reacción de Dicki Arbiter, ex jefe de prensa de la reina de Inglaterra.
«Todo esto me parece de muy mal gusto y totalmente infundado. La reina es la última persona en el mundo que consideraría mirar a otro hombre que no fuese su marido”, escribió en un artículo en The Times. “Esto solo es un cotilleo que ha estado por ahí rondando durante décadas, pero no tiene ningún fundamento. The Crown es una ficción. Nadie sabe las conversaciones privadas que tienen los miembros de la familia real, pero, claro, la gente siempre contará la historia que ellos quieran para hacerla más sensacionalista”, concluye.
En uno de los capítulos de la trama se cuenta un viaje que Isabel II hizo por Francia y por Estados Unidos acompañada de lord Porchester. Una escapada que en principio solo iba a durar una semana, pero que acabó dilatándose durante casi un mes, algo que provocó que a su vuelta al palacio de Buckingham su marido Felipe sospechara que el único motivo de ese retraso era que estaban teniendo una aventura. Al menos eso es lo que cuenta Peter Morgan, creador de la serie.
Morgan ha explicado, en una entrevista con GQ explicó que primero leen todo lo que pueden sobre un determinado espacio de tiempo en la vida de los personajes y, entonces, escogen ciertos eventos. «Una vez que he identificado lo que me interesa les pido a los investigadores que vayan mucho más allá. Me aportan documentos y yo empiezo a pensar en historias», ha dicho.
Entre las tramas históricas de esta tercera temporada está la presentación de Camilla Parker-Bowles o el primer marido de la princesa Ana, Mark Phillips. En la tercera temporada de la serie, Carlos y Ana ya son jóvenes.