El dirigente oficialista venezolano Diosdado Cabello aseguró este martes que le «resbala» la reunión que celebran este martes los países miembros del Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca (TIAR) en Bogotá aunque apoyó la idea de preparar una defensa -incluso armada- para enfrentar cualquier escenario.
«Las decisiones que puedan tomar estos rufianes que están reunidos hoy nos resbala, eso no es vinculante, no tiene ninguna vinculación con Venezuela, son los deseos de ellos», dijo Cabello, primer vicepresidente del partido de Gobierno y jefe de la Asamblea Constituyente, un foro plenipotenciario integrado solo por chavistas.
Sin embargo, el oficialista respaldó el plan del presidente venezolano, Nicolás Maduro, de entregar 13.000 fusiles a trabajadores públicos y a miembros de «los cuerpos combatientes de manera inmediata».
«Nosotros nos preparamos (…) Ellos se horrorizan, están hablando hoy de invadir a Venezuela y se horrorizan si el presidente dice que le va a entregar fusiles a las unidades de defensa de las empresas», prosiguió Cabello.
Explicó que la llamada revolución bolivariana, en el poder desde 1999, cuenta ahora con casi 4 millones de milicianos, un cuerpo conformado por civiles militantes del chavismo que recibe formación militar y forma parte de la estructura de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB).
Según Cabello, Maduro está «haciendo un acto legítimo de defensa de la patria».
El presidente colombiano, Iván Duque, pidió este martes a los países de América Latina «alzar su voz» y lograr una mayor articulación para aplicar sanciones al régimen de Maduro, durante la reunión del TIAR.
El gobernante afirmó que es necesario el TIAR porque el Gobierno de Maduro representa «una amenaza a toda una región» y está «desangrando al pueblo venezolano», lo que ha generado el éxodo de más de 4 millones de ciudadanos, de los cuales 1,5 millones han llegado a Colombia, el mayor receptor de migrantes.
«Aquí no hay acciones unilaterales ni invitaciones al uso de la fuerza. Aquí lo que hay es una invitación constante a que el cerco diplomático se profundice y para que las sanciones de todos nosotros sean cada vez más efectivas, más disientes», subrayó.
La invocación del TIAR en la crisis venezolana comenzó en septiembre pasado durante la Asamblea General de la ONU, cuando varios países se comprometieron mediante una resolución a identificar y sancionar a personas y entidades asociadas con Maduro y que estén vinculadas con actividades ilícitas, corrupción o violaciones de derechos humanos.
Para aprobar cualquier medida, es necesario el voto a favor de al menos 13 de los 19 países del TIAR, una especie de OTAN americana que han recuperado los países de la región después de décadas prácticamente en el olvido con el fin de presionar al Ejecutivo de Maduro. EFE
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