El Gobierno turco ha acusado este sábado a Israel de violar la libertad de culto y actuar de manera agresiva y provocadora por la intervención policial en la Explanada de las Mezquitas de Jerusalén durante el rezo de la tarde de ayer, el último viernes del mes sagrado de Ramadán para los musulmanes, incidentes en los que más de 200 palestinos tuvieron que se hospitalizados, según la Media Luna Roja.
«Condenamos enérgicamente el ataque de las fuerzas de seguridad israelíes contra los palestinos que rezaban en la mezquita de Al Aqsa y que dejó a muchos palestinos heridos», señaló el Ministerio de Exteriores turcos en un comunicado.
La intervención de la Policía israelí, que usó pelotas de goma y granadas aturdidoras, se produjo en el contexto de tensión por las protestas contra el desalojo de familias palestinas en favor de organizaciones colonas judías.
Exteriores turco acusó al Gobierno de israel de causar los incidentes y de atacar la libertad de culto de los palestinos y le conminó a «poner fin a sus políticas agresivas y provocadoras y a actuar con sentido común».
También Estados Unidos cuestionó ayer la violencia ocurrida en la Explanada de las Mezquitas, así como los posibles desalojos de familias palestinas en Jerusalén Este, ocupado.
España, Alemania, Francia e Italia también pidieron el jueves a Israel que revoque la decisión de construir nuevos asentamientos de colonos en la Cisjordania ocupada, al entender que «amenazan» las perspectivas de una resolución pacífica del conflicto palestino-israelí. EFE (I)