
El presidente de Colombia, Iván Duque, permanece en Cúcuta, tras ser atacado a bala el helicóptero militar que lo transportaba junto a los ministros de Defensa y del Interior, tras visitar el municipio de Sardinata.
Este atentado se habría perpetrado desde un sector en inmediaciones del aeropuerto, según el sitio digital del diario El Tiempo, de Bogotá.
El barrio Aeropuerto y el anillo vial occidental están ubicados en la Comuna 6 de Cúcuta, una de las zonas con mayor índice de inseguridad y tasa de homicidios en la ciudad, por su cercanía a la zona rural y la frontera con Venezuela.
En esta zona han sido desarticuladas algunas bandas dedicadas al microtráfico y refugios para algunos sicarios buscados por la Policía.
La ciudad, que en menos de dos semanas fue escenario de un atentado con carrobomba en una instalación militar (la Brigada 30) y de un ataque directo contra el Presidente de la República, tiene fuerte presencia de bandas del narcotráfico, milicias del Eln y delincuentes de las antiguas disidencias de las Farc.
Es, además, la primera región del país con más cultivos de coca, y la cercanía de la frontera con Venezuela le pone aún un punto más alto a las preocupaciones por el orden público.
Disparos desde un bosque
Varias unidades de la Policía Metropolitana de Cúcuta (Mecuc), Ejército Nacional y Casa Militar restringen el acceso a la terminal área y desplegaron unidades en los barrios cercanos con el objetivo de hallar los responsables del ataque, reporta El Tiempo.
Según se conoció, las ráfagas dirigidas contra la aeronave se habrían originado en una zona boscosa cerca al anillo vial occidental de Cúcuta. Otros afirman que los disparos se realizaron desde el barrio Aeropuerto, contiguo a la terminal.
Desde uno de los cerros de esta área, con dirección a las pistas de aterrizaje del aeropuerto internacional Camilo Daza, hombres armados habrían fijado el ataque contra el helicóptero, aprovechando el descenso de la aeronave.
Por ahora, el presidente Iván Duque permanece en Cúcuta, mientras el dispositivo de seguridad verifica que no se presente un hostigamiento o haya presencia de artefactos explosivos.
«Recibimos la orden de máxima alerta porque hay riesgo de la delegación presidencial. Los vuelos se retrasarán mientras las autoridades hacen su trabajo, se restablezca la seguridad y el presidente sea evacuado«, indicó un miembro del equipo de seguridad del aeropuerto, citado por El Tiempo.

