El ministro del Interior de Ecuador, Patricio Carrillo, informó este martes de la detención del sospechoso de haber violado a una menor en un transporte escolar, del que era su conductor, el pasado 21 de abril en Quito, caso que ha provocado gran indignación social.
«Luego de la denuncia de violación a una estudiante del Colegio Dillon en días pasados, la Policía de Ecuador detuvo al acusado de este delito infame que indignó al país», indicó Carrillo en un mensaje en su cuenta oficial de Twitter.
El ministro afirmó que el compromiso del Gobierno «con la lucha contra la violencia hacia las mujeres es inclaudicable».
La menor de 15 años fue supuestamente violada por el conductor del transporte escolar que la llevaba a su colegio de Quito, que se dio a la fuga tras dejarla junto a otros estudiantes en el centro.
La Fiscalía ecuatoriana informó del inicio de una investigación sobre este suceso, que habría ocurrido según los primeros indicios, cuando el conductor recogió en primer lugar a la menor y antes de ser trasladada al colegio.
Captura en Sucumbíos
El comandante general de la Policía Nacional, Carlos Cabrera, explicó este martes que las diligencias practicadas por la Dirección Nacional de Delitos contra la Vida, Muertes Violentas, Desapariciones, Extorsión y Secuestro (Dinased) condujeron a la ubicación en la localidad de Lago Agrio, provincia de Sucumbíos (noreste), del sospechoso este martes a las 7:45 hora local (12:45 GMT), en una zona selvática.
El responsable policial identificó al detenido como Darwin Clever J., acusado de la presunta violación de la adolescente en el transporte escolar de una institución educativa fiscal (pública), ocurrida el 21 de abril.
El detenido se había cambiado el color del cabello e iba sin documentos de identidad. Se encontraba huido y la recopilación de información permitió dar con su paradero en Sucumbíos, provincia fronteriza con Colombia.
Cabrera dijo que el detenido no tenía en su poder «elementos identificativos que le habilitan como ciudadano de la República del Ecuador» y que, tras ser sometido a un examen técnico pericial en Criminalística, se pudo determinar que se trataba del presunto autor del delito sexual.
El jefe de la Policía detalló que la violación se habría producido a las 13:00 hora local del jueves 21 de abril y que el sospechoso trasladó a su víctima al centro educativo y se dio a la fuga a las 14:30, «dejando el vehículo en donde transportaba a los estudiante escolares abandonado en las calles Colón y 9 de octubre» de la capital.
La drogó para violarla
Conforme a las sospechas, el conductor pudo haber drogado a su víctima, lo que apuntaría a una premeditación.
Los progenitores de la menor acusaron a la escuela de no haber brindado asistencia a su hija durante las cuatro horas que permaneció en las instalaciones educativas hasta que llegaron a recogerla, ni de ayudarles en las investigaciones, pues no les brindaron los datos del conductor, según medios locales.
El Ministerio de Educación indicó, cuando se conocieron los hechos, que la institución educativa activó los protocolos ante situaciones de violencia, lo que contempló el acompañamiento y protección a la estudiante, la comunicación directa con sus tutores y la presentación de una denuncia ante la Fiscalía.
Sin embargo, como parte de sus investigaciones, el Ministerio de Educación evaluará si las autoridades de la escuela donde estudia la denunciante cumplieron debidamente con todos los protocolos establecidos. EFE
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