
El influyente clérigo chií Muqtada al Sadr pidió este martes a sus seguidores que se retiren en un plazo de una hora de la fortificada Zona Verde de Bagdad, donde este lunes irrumpieron después de que el líder anunciara su retirada «definitiva» de la política, y pidió disculpas a la población por lo que está sucediendo en el país.
«Si en 60 minutos no se retiran de la sentada frente al Parlamento, dejaré de ser parte de la corriente sadrista», gritó el líder en un discurso de seis minutos en Nayaf, su ciudad natal ubicada en el sur de Irak, que incidió en que la retirada sea «completa».
«Pido disculpas al pueblo iraquí, ya que es el único perjudicado de lo está ocurriendo», afirmó el líder chií, en referencia a los disturbios, que han causado ya 35 muertos y más de 250 heridos, según dijeron fuentes de seguridad a Efe.
El clérigo se mostró «triste y cansado por lo que sucede en Irak» y añadió que, «quienquiera que haya iniciado la discordia ayer, esa parte, la otra o la tercera, el asesino y el asesinado estarán en el infierno».
Violencia, muertos, heridos
«La revolución que ha sido manchada por la violencia no es una revolución», apuntó Al Sadr, quien criticó la revolución del movimiento sadrista».
Desde que ayer Al Sadr anunciara su retirada definitiva de la política, miles de sus seguidores salieron a las calles e irrumpieron en el Palacio Presidencial y en la sede del Gobierno, además de hacer una sentada frente al Parlamento, entre escenas de violencia que se prolongaron durante toda la noche.
Bagdad es el centro de los disturbios y la Zona Verde, el área fortificada de Bagdad que alberga los principales edificios gubernamentales se ha convirtió en un campo de batalla.
Los enfrentamientos han tenido lugar entre los seguidores de Al Sadr contra las fuerzas de la seguridad iraquíes y contra combatientes de Saraya al Salam (Brigadas de la Paz), una milicia de Al Sadr, aunque las fuentes de seguridad no han apuntado a ningún autor.
Toque de queda
Tras el asalto de ayer, las autoridades iraquíes anunciaron un toque de queda en Bagdad, que entró en vigor a las 15.30 hora local (12.30 GMT), y luego lo ampliaron a todo el país a partir de las 19.00 horas (16.00 GMT), aunque las manifestaciones han proseguido.
En los últimos meses Irak ha sido escenario de una gran escalada política debido a la parálisis, dado que tanto el Poder Judicial como el Parlamento suspendieron su actividad, y el Gobierno aún está en funciones. EFE

