Mónica Rubalcava
Ciudad de México.- En el marco de la clausura del Mondiacult 2022 en la Ciudad de México, 48 países exigieron el final de la agresión de Rusia a Ucrania después de que se aceptara por unanimidad la Declaración por la Cultura que plantea un plan de desarrollo global de la misma.
“Nos hemos reunido esta semana en México para apoyar el desarrollo de este sector cultural, para la aportación al desarrollo sostenible y la promoción de la paz. Mientras sostuvimos estos intercambios uno de nuestros miembros -Rusia- siguió teniendo una guerra de agresión injustificable e ilegal sobre Ucrania violando la ley internacional”, expresó el representante de Lituania, Kairys Simonas.
“Exigimos un fin de la agresión en contra de Ucrania para garantizar la protección de mayor daño al patrimonio cultural mueble e inmueble en todas sus formas”, ahondó Simonas a nombre de países como Guatemala, Estados Unidos, Reino Unido, Suiza, además de la Unión Europea, entre otros.
El ministro resaltó que las cifras que tenía la Unesco, hasta el 24 de septiembre, sobre los daños al patrimonio cultural debido a la invasión rusa, ascendían a 193 sitios, mientras que el ministerio de política cultural de Ucrania calculaba daños a casi 600 sitios culturales.
“No podemos seguir contemplando cómo un país intenta borrar la cultura e identidad de otro, y no podemos aceptar acciones continuas en contra de la constitución de un país, así que llamamos a Rusia a que se retire de las fronteras reconocidas con Ucrania”, apuntó Kairys.
Después de unas cuantas intervenciones, el viceministro de cultura ruso, Sergey Obryvalin, tuvo una breve participación, pero varios de los ministros presentes abandonaron la sala antes de que el funcionario tomara la palabra.
APROBACIÓN Y VISTAS AL FUTURO
Con la presencia de la presidenta de la conferencia de la Unesco -la también secretaria de cultura mexicana- Alejandra Frausto, el subdirector general de cultura de la Unesco, Ernesto Ottone, el secretario de relaciones exteriores, Marcelo Ebrard, activistas, artistas, y demás ministros, la Conferencia Mondiacult 2022 celebró su final después de tres días de discusiones y conversaciones sobre el futuro global en cuestión cultural.
«Las declaraciones hoy son de exclusión de los demás, para acentuar conflictos, promover lealtades, o para condenar a otros -con o sin razón-. Pero es muy extraordinario tener una declaración que hable sobre el futuro de la humanidad y los fundamentos de la convivencia internacional como la que han hecho el día de hoy», celebró Ebrard quien consideró que una declaración como esta, hace frente al «preludio de grandes conflictos» de la actualidad.
Durante la ceremonia se hizo un recuento de las actividades que se llevaron a cabo en estos tres últimos días, así como un repaso por los esfuerzos previos de la Unesco y de los ministros de Cultura para la preparación de la conferencia.
La declaración es resultado de diez meses de negociaciones multilaterales que presenta a la cultura como “un bien público mundial”, exige la integración de esta “como un objetivo específico por derecho propio”, que se inserta en los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas.
Entre los principales temas que se trataron con gran énfasis estuvieron el tráfico ilícito de bienes culturales, la regulación de las plataformas digitales a favor del desarrollo justo de la cultura, la vulnerabilidad de los profesionales de la cultura, la crisis climática, por mencionar algunos.
Sin embargo, el relator de la ceremonia, Hilmar Fahrid, viceministro de cultura de Indonesia, hizo énfasis particular en solucionar los conflictos bélicos que enfrenta el mundo.
“La destrucción de patrimonio entre países que se enfrentan es cada vez más común, hacemos un llamamiento para unir fuerzas en la condena unánime de la destrucción de patrimonio cultural en todas sus formas”, expresó.
El texto adoptado por los 150 estados define un conjunto de derechos culturales que deberán ser tomados en cuenta en las políticas públicas en torno a los derechos sociales, económicos, que incluyen la libertada de artistas y derechos de las comunidades indígenas de salvaguardar y transmitir sus conocimientos.
Asimismo, por medio de un comunicado fue anunciada la creación de un museo virtual de bienes culturales robados, por parte de la Unesco e Interpol que fungirá como una herramienta educativa y de investigación.
Entre los demás compromisos también se encuentra la creación del Foro Mundial sobre Políticas Culturales, que la Unesco organizará cada cuatro años, con la finalidad de darle seguimiento a lo sucedido en el Mondiacult 2022, para que no tengan que pasar otros 40 años de espera para la regulación mundial de la cultura. EFE
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