El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, afirmó este sábado que la reanudación del proceso de negociación en México entre su Gobierno y la oposición agrupada en la Plataforma Unitaria abre un «nuevo capítulo» para avanzar hacia la «paz y el bienestar» de los venezolanos.
Gobierno y la oposición de Venezuela firmaron en México este sábado el Segundo Acuerdo Parcial para la Protección del Pueblo Venezolano cuyo objetivo principal es la recuperación de recursos del Estado del país caribeño bloqueados en el sistema financiero internacional.
Se trata de la voluntad de ambas partes de descongelar los fondos estatales en el extranjero para liberar entre tres y cinco mil millones de dólares de origen venezolano. Una parte de ese capital servirá para financiar al Gobierno chavista y la otra irá a parar a un fondo de ayuda humanitaria manejado por la ONU. “Esto se va a firmar y confiamos en que en breve comience a circular ese dinero”, comentan fuentes internas de la negociación, y así ocurrió.
El Gobierno chavista —que calcula que tienen 5.000 millones de dólares congelados en el extranjero; mientras la oposición los cifra en menos de 3.000 millones—, urgido de financiación, ha condicionado su presencia en México a la relajación de las sanciones internacionales.
El Banco de Inglaterra tiene retenidas 31 toneladas de lingotes de oro de Venezuela y lo mismo ocurre con algunas cuentas del Banco Central de Venezuela en Estados Unidos.
Recuperar el dinero congelado
«La firma del Segundo Acuerdo Parcial entre el Gobierno bolivariano que presido y la Plataforma Unitaria de una de las oposiciones, abre paso a un nuevo capítulo para Venezuela, en función de seguir avanzando hacia la paz y el bienestar que todas y todos los venezolanos anhelamos», indicó el mandatario en su cuenta de Twitter.
Maduro saludó la reanudación de este proceso, que había sido suspendido formalmente en octubre de 2021 por decisión del Ejecutivo, al tiempo que dijo que el «empeño» siempre será dialogar con toda la sociedad venezolana.
El acuerdo ha sido anunciado antes que nadie, en sus redes sociales, por el presidente de Colombia, Gustavo Petro.
El representante mediador de Noruega, Dag Nylander, advirtió a las partes que en caso de que una de ellas tome cualquier medida unilateral que modifique lo acordado será inválida, aunque las partes podrán realizar acuerdos anexos a lo general siempre y que se hayan debatido anteriormente en la medida de lo posible.
A la vez, el mediador recordó que, aunque la comunidad internacional apoye el proceso, los avances «dependerán de los venezolanos».
El principal negociador del chavismo es Jorge Rodríguez, pero asiste también a las renunciones un hijo de Maduro, que tiene su mismo nombre, y Camila Fabri, la esposa de Álex Saab, el empresario colombiano acusado por EE UU de ser un testaferro de Maduro. Su presencia en las conversaciones ha permitido suponer que en algún punto Maduro exigirá la liberación de Saab, encarcelado en Miami.
- Con reportes de EFE.