La Comisión Europea desembolsó este miércoles un tramo de 500 millones euros de ayuda macrofinanciera a Ucrania, el último pago de un paquete global de 5.000 millones de euros que el bloque ha entregado a Kiev a lo largo de este año.
Con el pago de hoy el apoyo total en ayuda macrofinanciera de la UE enviada a Ucrania desde el comienzo de la guerra iniciada por Rusia el 24 de febrero pasado ha alcanzado los 7.200 millones de euros, informó el Ejecutivo comunitario.
Estos recursos, señala Bruselas, han sido transferidos a las autoridades ucranianas «en forma de préstamos en condiciones muy favorables» cuyos intereses serán cubiertos por el presupuesto comunitario.
El desembolso tuvo lugar tras una «evaluación favorable» de siete reformas «estructurales» para reforzar la solidez y la estabilidad económica de Ucrania, mejorar el entorno de negocios, reforzar el Estado de derecho y la gobernanza y garantizar su seguridad energética.
Este último desembolso tiene lugar apenas dos días después de que los Estados miembros llegaran a un acuerdo sobre el paquete de ayuda macroeconómica a Ucrania a lo largo de 2023, que asciende a 18.000 millones de euros.
Para sacarlo adelante los Veintisiete tuvieron que superar el veto de Hungría, que bloqueó su aprobación hasta que el resto de países se dotaron de un instrumento que hubiese permitido sacar adelante este nuevo paquete de asistencia económica sin el visto bueno de Budapest.
El Gobierno de Viktor Orbán levantó finalmente su veto y la UE podrá acudir a los mercados financieros para captar los recursos que transferirá después a Kiev avalada por el presupuesto comunitario.
El objetivo del Ejecutivo comunitario efectuar los primeros desembolsos ya en enero a Ucrania, que necesita entre 3.000 y 5.000 millones de euros al mes para sus necesidades urgentes, según cálculos de Kiev. EFE