La tecnología está presente en muchos momentos de nuestra jornada diaria, ya sea en cómo trabajamos, cómo nos comunicamos con nuestros seres queridos e incluso cómo hacemos las compras rutinarias. Son muchos los sectores que se han visto obligados en las últimas tres décadas a ir adaptando su actividad a estos cambios del consumo, y en este artículo queremos poner el foco en una parte importante del entretenimiento: el ocio online.
Y es que los juegos de casino, que encarnan parte de la diversión en el mundo digital, son todo un ejemplo de cómo una práctica tradicional puede migrar con total éxito al mundo de las pantallas. Entretenimientos que cuentan con tantos adeptos como el blackjack, la ruleta o las tragamonedas se han adaptado a la perfección a las nuevas demandas de la sociedad presentando a los usuarios, entre muchas características, modalidades de los diferentes juegos y sus adaptaciones.
Sacando el máximo partido a la tecnología
No solo el ocio virtual, sino todas las industrias se han beneficiado de la mejoría en las conexiones a la red y la reducción del tiempo de latencia que antes desesperaba a los usuarios. En la actualidad se puede establecer comunicación desde cualquier lugar, ya sea usando una red móvil o una red comunitaria, y sin tener demasiado en cuenta los aspectos técnicos de conectividad que se requerirán. Las esperas de antaño propias de las actividades más complejas ya han pasado a la historia.
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Relacionado con el punto anterior cabe poner en valor la multiplataforma o, lo que es lo mismo, los contenidos ‘responsive’ que proponen estas plataformas de juego. Lejos de los primeros pasos por internet, en los que todo el consumo estaba ideado para que se diera en computadoras, los diferentes juegos tienen una perfecta capacidad de adaptación a todos los tipos de pantalla de dispositivos inteligentes existentes, con especial atención al celular y a la tablet.
Aprovechando al máximo esa mejora en las conexiones, se ha dado un paso más allá en la interacción con los diferentes usuarios que comparten el mismo juego. Esto se puede ver, por ejemplo, en partidas como las del poker donde las consecuencias de cada una de nuestras acciones tienen repercusión de manera directa en el transcurso de la partida. Lo mismo que sucedía en torno a una mesa compartida con amigos y conocidos, pero ahora trasladándose al mundo online.
Y un paso más a esa interacción es la tecnología streaming, que permite a los internautas ver aquello que está sucediendo en directo y que tiene impacto en el transcurso del juego. Esto se puede observar, por ejemplo, en las partidas de blackjack, en las que hay un dealer real al otro lado de la pantalla repartiendo las cartas, o en los lanzamientos de ruleta, viendo como la pequeña bola viaja por encima de las diferentes casillas.
Mucha y variada oferta de juegos
Si por algo se caracteriza el mundo online es por la multiplicación de la oferta y las muchas posibilidades que se les brinda a los usuarios. Esto, que también sucede en las plataformas de contenido audiovisual o en las aplicaciones de música, ocurre del mismo modo en el ocio online. Son muchas las posibilidades de juego que se les presentan a los jugadores, siendo de especial mención aquellas propias de las tragamonedas, con una gran diversidad temática.
Pero no todo se basa en inspiraciones y referencias temáticas; también hay prácticas originales como podrían ser el blackjack, la ruleta o el propio poker que tienen varias modalidades reconocidas, aunque siempre suele destacar una por encima de las otras. En las plataformas digitales especializadas se presentan las más aclamadas por el público, por muy originales que sean, y que en su día eran difíciles de encontrar en los salones de juego y los casinos físicos. (I)