
El exasambleísta del correísmo Roberto Cuero ha rechazado la mención del candidato presidencial Christian Zurita, quien ha recordado en un tuit la noche del 14 de agosto, que el asesinado Fernando Villavicencio solicitó a la Fiscalía el pasado 3 de abril, que si llega a morir en un atentado de sicarios, se lo investigue a Cuero, y a otros tres asambleístas de la Revolución Ciudadana (Ronnie Aleaga, Ronald González y Walter Gómez), además del socialcristiano Pablo Muentes.
«Nunca hubo seguridad del lado que vinieron los tiros. Nunca hubo un anillo de seguridad. ¿Por qué a Villavicencio lo sacan por la puerta principal? ¿Qué capacidad podemos tener nosotros para influenciar en el cuerpo de seguridad del señor Villavicencio? ¿Será acaso por influno síquico?», ha dicho Cuero, obviando el hecho de que Villavicencio fue asesinado con tres tiros de fusil por francotiradores de un equipo de sicarios que llegó a Quito proveniente de Colombia.
«Las declaraciones del precandidato Zurita son irresponsables. ¡Es una total irresponsabilidad lo que ha hecho este señor Zurita! ¡Poner en riesgo nuestras vidas! Las vidas de nuestros hijos, de nuestras familias. Imagínese el riesgo que estanos corriendo, ¡mi hijo pequeño de ocho años!», continuó Cuero, el único que habló, mientras a su lado se encontraban Ronald González y Walter Gómez, todos candidatos a la reelección. Ronnie Alega no apareció.
Cuero dijo que aunque las diferencias con Villavicencio eran públicas «nunca lo consideramos un enemigo personal, sino un adversario político». Advirtió que «cuidado intenten desviar la atención… darnos un golpe a la Revolución Ciudadana«, y señaló que la denuncia referida por Zurita nunca contó con el reconocimiento de firma y rúbrica de Fernando Villavicencio.
«Él tenía por costumbre hacer denuncias», concluyó.
Testimonios anónimos
Según Zurita, Villavicencio había presentado esta denuncia basada en el testimonio anónimo de otros parlamentarios, quienes le habían indicado que Cuero y los otros supuestamente planificaban el atentado.
Cuero, que rechazó la versión, hizo notar que la narración había surgido en abril pasado, semanas antes de que el presidente del país, Guillermo Lasso, declarara la «muerte cruzada», con la que disolvió el Parlamento y forzó la convocatoria de elecciones extraordinarias, a las que se presentó Villavicencio.
También recordó que, ya en la campaña electoral, Villavicencio había acusado a un líder de la banda criminal Los Choneros, Adolfo Macías, conocido con el alias de «Fito», de planificar un posible atentado por su lucha contra las mafias del narcotráfico.